Los puentes que se hacen por la cara: las ausencias injustificadas en el trabajo se concentran los viernes y los lunes

Mario Beramendi Álvarez
M. BERAMENDI LA VOZ

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Absentismo laboral ascendió al 4,8% en España en 2016
Absentismo laboral ascendió al 4,8% en España en 2016 Europa press

Las herramientas tecnológicas de control horario permiten analizar con más detalle cuáles son las características de la impuntualidad y del absentismo laboral en las empresas españolas

21 mar 2023 . Actualizado a las 11:27 h.

El absentismo laboral injustificado alcanza los viernes y los lunes las tasas más altas, muy por encima del resto de días de la semana, con índices, respectivamente, del 17,09% y del 17,87 %, el doble de lo que se registra en otras jornadas. Esta es una de las principales conclusiones que arroja un estudio sobre el comportamiento laboral en España elaborado recientemente por GeoVictoria, una empresa con presencia en 20 países, entre ellos España, y que ha desarrollado una herramienta para la gestión del control horario del personal.  «Según los datos obtenidos a través de nuestro software de asistencia, las mayores tasas de absentismo justificadas se dan los lunes y los viernes. Esto quiere decir que, normalmente, pedimos esos días con más frecuencia como vacaciones o permisos de otro tipo, como en el caso de una mudanza o  ir al médico. Sin embargo, el dato más alarmante es que el absentismo injustificado también se eleva esos dos días, llegando incluso a duplicar el justificado», explica Iria Najarro, directora comercial de la compañía. Se habla de esta práctica cuando el empleado falta a su puesto de trabajo o no cumple con sus funciones en el horario laboral pautado con la empresa sin haber presentado ninguna justificación o motivo que lo respalde

Los expertos apuntan a que, aunque no pueden asegurarse a ciencia cierta las causas de este comportamiento, suele asociarse a varios factores; por ejemplo, que el lunes y el viernes, al ser el día de comienzo de semana y el del final, representan las dos jornadas en que las se pueden dar más situciones de cansancio o contratiempos. Las ausencias en los lunes suelen vincularse con acontecimientos que hayan podido ocurrir el fin de semana y de los que no se ha podido avisar a la empresa al tener lugar en sábado o domingo: desde cuestiones imprevistas, como enfermedades o accidentes, hasta inconvenientes al volver a casa tras un fin de semana fuera que, al no estar planificado, pueden dar lugar a una ausencia injustificada a ojos de la  empresa. «Por otro lado, los viernes suele haber jornada intensiva en muchas empresas y eso puede propiciar que si, por ejemplo, hemos alargado mucho las jornadas el resto de días de la semana, estemos más cansados y sea más fácil que tratemos de compensar con ese viernes que tiene menos horas laborables; también es normal que planifiquemos tareas de nuestra vida personal en viernes aprovechando que nuestra jornada termina antes y que esto acabe convirtiendo el viernes en el día perfecto para realizar tareas como mudanzas, que terminan por ocupar todo el día y crean una ausencia que no estaba solicitada», precisa Iria Najarro.

En cuanto a  la jornada de los sábados y domingos, el estudio revela otro dato llamativo: los empleados que trabajan los fines de semana llegan más con retraso a sus puestos, lo que se debe, en gran medida,  a que existe una menor supervisión por parte de la empresa y que se encuentran menos empleados. Sin embargo, la tasa de ausencias justificadas es menor, de un 5,55 %.

De enero a diciembre

Igual que en el caso de los días de la semana, en España, el comportamiento laboral también cambia según el mes en el que nos encontremos. Los datos del estudio muestran una mayor proporción de impuntualidad en el segundo semestre del año. La información disponible revela que los trabajadores llegan más en hora en los meses de enero y febrero, quizá debido a los buenos propósitos del nuevo año. Por otro lado, hay mayor informalidad horaria en agosto y septiembre, meses en los que se vuelve de las vacaciones de verano y el ritmo de rutina cambia.  A estos dos se suma diciembre. A finales de año, según los expertos, se puede notar un mayor cansancio, lo que se suma a las cenas y los eventos propios de estas fechas, lo que provoca que se registren unas de las tasas de atrasos más altas. La impuntualidad de enero y febrero es de tan solo un 7,24 % y un 7,91 %, respectivamente, mientras que en el mes de agosto se dispara hasta el 13,93 %, casi el doble. En diciembre llega hasta el 13,61 %.