La compañía coreana, que lleva casi dos décadas como fabricante número uno mundial en televisores, mejora sus dispositivos con las tecnologías Quantum Dot y Vision AI Companion.
03 nov 2025 . Actualizado a las 21:51 h.Samsung mantiene su posición como número uno mundial en televisores desde hace 19 años, un liderazgo especialmente sólido en los segmentos premium y de gran pulgada. La clave está en la apuesta por tecnologías que mejoran la calidad de imagen, resuelven problemas cotidianos y abren nuevas formas de disfrutar de la televisión. Los reflejos en pantalla son uno de los grandes enemigos de la televisión en casa. Un estudio reciente de la marca coreana revelaba que hasta el 95 % de los usuarios se han visto afectados por los reflejos en algún momento, y un 86 % reconocen que este problema «arruina» la calidad de imagen y la inmersión en cada escena. La incidencia es mayor en televisores OLED, donde el 22 % de los usuarios señala los reflejos como su principal frustración, frente al 12 % en QLED. Muchos consumidores admiten que han tenido que recolocar muebles, bajar persianas o cambiar la iluminación de la sala para poder disfrutar de su televisor.
Esta barrera la ha roto Samsung con la primera gama de televisores sin reflejos del mercado, capaz de mantener la profundidad de los negros sin perder claridad frente a la luz ambiental. Presente en las gamas Neo QLED 8K, Neo QLED, OLED, The Frame y The Serif, esta innovación redefine la categoría, según explican desde la compañía, ya que «ofrece una experiencia de visionado sin interrupciones en cualquier entorno, sea cual sea la hora del día o la ubicación del televisor».
La calidad de imagen es el primer factor que los consumidores valoran al elegir un televisor. Según una encuesta, la resolución de pantalla, la nitidez y el brillo se sitúan entre los principales motores de compra, por encima incluso del precio o del tamaño. En este terreno, Samsung ha marcado la diferencia durante más de una década con su tecnología exclusiva Quantum Dot, que se ha convertido en un estándar de calidad en la industria. La clave está en su capacidad para reproducir el 100 % del volumen de color con precisión certificada, incluso en entornos de alta luminosidad. Esto significa que escenas brillantes, como una puesta de sol o un partido a plena luz del día, se perciben con la misma riqueza cromática y detalle que una película en penumbra, logrando un mayor realismo.
Samsung ha llevado Quantum Dot a diferentes formatos y gamas, desde sus televisores QLED hasta los más recientes Neo QLED. Modelos como el QN90F combinan esta tecnología con la retroiluminación Mini LED y la inteligencia artificial para analizar cada escena y ajustar brillo, contraste y movimiento en tiempo real. El resultado son imágenes vibrantes y ultra definidas, con un nivel de detalle que «convierte cada emisión deportiva, serie o videojuego en una experiencia envolvente». Además, Quantum Dot: al estar fabricada sin cadmio ni materiales pesados, por lo que ofrece una alternativa más sostenible.
Otra tecnología que apuntala el éxito de Samsung es Vision AI Companion. Los televisores no solo reproducen contenido, sino que entienden el entorno y al consumidor y se adaptan a él. Además de analizar las escenas en tiempo real y optimizar brillo, contraste y sonido según las condiciones de las diferentes estancias, incorpora funcionalidades que simplifican la vida del usuario: traducción instantánea de subtítulos con Live Translate, búsquedas contextuales sobre el contenido que está viendo o disponer de su día a día en pantalla con Click to Search y Bixby.
Entre los formatos singulares que ha introducido Samsung destaca The Frame, con el que la compañía ha reinventado la relación entre pantalla y espacio vital para que el arte forme parte de lo cotidiano. Este modelo se convierte en un cuadro cuando no está en uso gracias a su Modo Arte y a un catálogo digital con más de 3.000 obras de museos e instituciones internacionales, entre ellas piezas de referencia del MoMA o los archivos de artistas como Basquiat o Magritte. Con marcos intercambiables, One Connect inalámbrico y un diseño minimalista, The Frame se integra en cualquier estilo de interiorismo, ofreciendo al usuario la posibilidad de convertir su televisor en una galería personal.