La queja de una santiaguesa sobre las frecuencias de los buses urbanos suma miles de reacciones en redes: «No puede ser un servicio más nefasto»
VIVIR SANTIAGO
Cuando el autocar pasaba por la marquesina en la que esperaba, el conductor le hizo un gesto con la mano y no paró: «Esto sucede con el 5, con el 11 y con todas las líneas», cuenta Loren
05 oct 2024 . Actualizado a las 10:57 h.Las quejas sobre el funcionamiento de los autobuses urbanos en Santiago son una constante. Cada poco trascienden nuevos lamentos sobre las frecuencias, sobre las actualizaciones en la aplicación o sobre la cantidad de gente a la que se le deja subir en los vehículos. Esta vez fue una usuaria de TikTok la que expuso su caso particular, con la particularidad de que otros tantos se sintieron tan identificados con lo que contaba que enseguida se convirtió en viral. Loren (@inspolorenn) verbaliza en un vídeo sus quejas personales: «¿Cómo puede pasar esto? Es un servicio pésimo».
Cuenta a La Voz que ese día se tuvo que desplazar hasta Vite para una cita médica y la línea que la llevaba, la 5, ya iba llena en el viaje de ida. «La gente iba apilada y de pie», recuerda sobre el recorrido, aunque, para ella, el problema real fue la vuelta. El autocar llegó cuando llevaba diez minutos esperando en la marquesina y, en vez de pararse, continuó su camino. La joven explica que el conductor les hizo un gesto con la mano a los que allí esperaban indicando que, como iba lleno, no se podía subir más gente. Miró la aplicación, vio que al siguiente le quedaban todavía unos 15 minutos y decidió ir a pie hasta su destino. «Esto pasa con el 5, con el 11 y con todas las líneas, porque es un servicio nefasto», lamenta la usuaria.
Ella se define como una usuaria frecuente del transporte público. Ya sea por ocio o para ir a trabajar, asegura subirse a algún bus todos los días. Sobre todo, a las líneas 5, 11 y 6A. No es la primera vez que le pasa lo de quedarse tirada y tener que llegar a casa andando. Por ese motivo, adelanta sus horas de salida para llegar con tiempo suficiente para lo que pueda pasar. «El 11 siempre va lleno. Te tienes que apiñar tanto hacia atrás que, a la hora de bajar, no das salido de la gente que hay. En el 6A es imposible ir. Donde lo cojo yo, los sábados y los domingos, que es cuando más frecuencias hay, va lleno», explica Loren, que asegura que, para ella, la peor de las frecuencias es la de O Milladoiro.
«Luego te dicen que te muevas en autobús, que es maravilloso…», continúa la joven. Con el inicio del curso universitario, son muchas las líneas que van completas a primera hora de la mañana. Los jóvenes, que se mueven en transporte público, son los que más lamentan el funcionamiento de la red de autobuses. «Menuda odisea subirse en el 15 a las nueve de la mañana», escribía una usuaria en sus redes sociales, en un mensaje que también sumaba cientos de reacciones. Los días de lluvia, la situación se agrava. Para las jóvenes, para calcular bien los tiempo, lo mejor es ir a los sitios caminando.