«Francisco, la ciudad reza por vos»: el mensaje de aliento que Buenos Aires envía al papa
SOCIEDAD
Junto al texto, cada noche se proyecta sobre el Obelisco una imagen del pontífice. El arzobispo de la ciudad presidirá este lunes un oficio religioso por la salud de Bergoglio
23 feb 2025 . Actualizado a las 12:56 h.Buenos Aires, la ciudad que vio nacer al papa Francisco hace 88 años, vive estos días muy pendiente de la salud del pontífice, hospitalizado desde el pasado 14 de febrero en el Hospital Gemelli de Roma debido a una neumonía bilateral. Si la muestras de afecto y oración se han multiplicado a lo largo y ancho del planeta, Argentina, país natal de Bergoglio, no podía ser la excepción.
Desde la Basílica de San José de Flores, donde un joven Jorge Mario Bergoglio sintió su vocación, hasta las iglesias más humildes de Buenos Aires —también en el resto del país— miles de argentinos se congregan a diario para pedir por su pronta recuperación.
Sobre el Obelisco de Buenos Aires, icono indiscutible de la ciudad, se proyecta cada noche la imagen del papa y un mensaje de aliento que aboga por su pronta recuperación: «Francisco, la ciudad reza por vos». La iniciativa del gobierno de la ciudad, que se extenderá hasta este lunes 24 de febrero, pretende expresar la solidaridad de los porteños y, por extensión, de todos los argentinos con Bergoglio.
Asimismo, el Arzobispado de Buenos Aires convocó a una misa por la salud de Francisco que se celebrará mañana lunes, 24 de febrero, a las 17.00 horas (hora local) en Plaza Constitución. «Como Iglesia porteña, rezamos por la salud del papa. Durante la semana, las comunidades parroquiales también estarán ofreciendo la misa por su salud». Está previsto que el arzobispo de Buenos Aires, Jorge García Cuerva, presida el oficio religioso en la plaza en la que en tantas ocasiones el entonces cardenal Bergoglio «rezó por su pueblo».
Por su parte, la Conferencia Episcopal Argentina ha hecho un llamamiento a todos los fieles a unirse en una cadena de oración por la salud del pontífice. «Reunámonos para que nuestra oración lo acompañe y anime en este momento de debilidad».