
El pequeño Nash, que nació a las 21 semanas pesando 285 gramos, estuvo ingresado más de seis meses en la UCI neonatal
02 ago 2025 . Actualizado a las 13:32 h.Nash Keen ha hecho historia. El pequeño estadounidense, que nació con solo 21 semanas de gestación, celebró su primer cumpleaños el pasado mes de julio entrando oficialmente en el Libro Guinness de los Récords como el bebé más prematuro en sobrevivir. Al nacer, medía apenas 24 centímetros y pesaba 285 gramos, poco más que una barra de mantequilla. Tras permanecer más de seis meses en la UCI neonatal, logró superar todas las expectativas médicas y hoy es un símbolo mundial de esperanza en la neonatología. Hasta el nacimiento de Nash, el récord mundial lo tenía Curtis Zy-Keith Means, nacido en Alabama en 2020 con 21 semanas y un día de gestación.
Doce meses después del parto, los padres del menor, Mollie y Randall Keen, explican en una entrevista que el primer año no ha sido fácil. Nash ha estado sometido a un seguimiento médico intensivo debido al alto riesgo de secuelas como parálisis cerebral, problemas respiratorios crónicos, deficiencias visuales o dificultades cognitivas.
«Es muy decidido y curioso, siempre está sonriendo», explica Mollie, quien antes de la llegada de Nash había dado luz también prematuramente a su hija McKinley, que nació en la semana 18 de gestación, pero no sobrevivió.
La mujer dice que durante su primer año de vida, el niño ha recibido «cuidados altamente especializados y vigilancia constante por parte del equipo de Neonatología del Hospital Infantil Stead Family». Según la doctora Amy Stanford, el bebé «demostró en todo momento una resiliencia notable y, tras unas semanas excesivamente críticas, comenzó a progresar de forma constante».