La empresa Erimsa, que pretende explotar tres yacimientos de cuarzo en Terra Chá, difundió ayer una nota en la que insiste en que cumple con las bases del régimen de suelos rústicos de especial protección agropecuaria, forestal o de infraestructuras que recoge la Ley de Minería de Galicia. La industria asegura que creará 30 puestos de trabajo y que respetará los ciclos productivos de los terrenos agrícolas en Terra Chá.
La sociedad remitió la nota días después de que el SLG y un ganadero de Goá presentaran recurso de revisión contra la resolución que recoge las concesiones de explotación, que afectan a terrenos de los municipios de Vilalba, Cospeito, Castro de Rei, A Pastoriza y Abadín.
«Erimsa -señala en la nota- reitera su compromiso de que la actividad extractiva que tiene previsto desarrollar en Terra Chá no perjudicará al sector agropecuario». «La empresa -añade- cumple con las bases de régimen de suelo rústicos de especial protección agropecuaria, forestal o de infraestructuras, recogido en la nueva Ley de Minería de Galicia, ya que preserva los terrenos de alta productividad y garantiza la utilización de los recursos naturales».
Erimsa insiste que reafirma su disposición «recogida en el protocolo firmado con la Consellería de Innovación e Industria, de no afectar en ningún caso a viviendas, elementos constructivos permanentes afectos a las explotaciones ganaderas y agropecuarias, naves, complejos deportivos o culturales, carreteras, ríos o elementos del patrimonio cultural».
Condiciones económicas
Los responsables de la sociedad se comprometen también a devolver los terrenos a sus propietarios «en perfectas condiciones para el uso anterior y a trabajar un máximo de dos meses en cada hectárea». Recuerda además que pactarán con los propietarios las condiciones económicas del alquiler de las parcelas afectadas.
Erimsa recuerda en la nota que respetará los ciclos productivos «de modo que los agricultores puedan programar las plantaciones y los cultivos sin tener interferencias en las cosechas» e insiste en que la concentración parcelaria es compatible con la actividad de la explotación minera.
La empresa se compromete a presentar un informe anual de seguimiento medioambiental y respetar los espacios de protección.
«Erimsa -señalan en la nota- aplica desde hace dos décadas en otras zonas de Galicia similares orográficamente el mismo sistema de cribado de terrenos que está previsto implantar en Terra Chá, sin que se hayan producido incidentes».