Inspección de trabajo descubre temporeros en situación irregular en Valdeorras y O Ribeiro

La Voz OURENSE

AGRICULTURA

Foto de archivo de trabajos de vendimia.
Foto de archivo de trabajos de vendimia. MIGUEL VILLAR

Algunas bodegas tuvieron que parar de vendimiar porque la empresa de servicios que habían contratado no pudo mandar las cuadrillas apalabradas

12 sep 2025 . Actualizado a las 11:43 h.

Con el inicio de la vendimia comenzaron también las inspecciones de trabajo. En los últimos días, los funcionarios han desarrollado parte de su jornada laboral entre cepas, tanto en O Ribeiro como en Valdeorras, que es donde la recogida de la uva es más generalizada en estas fechas. Y en esas primeras visitas detectaron la presencia de varios jornaleros en situación irregular, es decir, temporeros que no tenían los papeles en regla para trabajar en España. Detectar estos casos es el objetivo de las inspecciones, asegura el subdelegado del Gobierno en Ourense, Eladio Santos. «Non se buscan casos de que se está un cuñado facendo labores de vendima, por aí non vai a cousa», añade. Se trata de garantizar que quien esté trabajando lo haga conforme a la ley: con un contrato, cotizando a la Seguridad Social y con garantías de cobertura en caso de que se produzca accidente laboral. Forma parte, insiste, del proceso habitual de inspección, tanto en esta como en otras campañas agrarias así como en el resto de sectores.

En caso de detectar alguna irregularidad, los inspectores levantan acta. Y en ocasiones solicitan el apoyo de la Guardia Civil en sus visitas, que es lo que sucede estos días en la vendimia.

Lo ocurrido está teniendo consecuencias directas en las bodegas. En Valdeorras hubo varias que este jueves tuvieron que parar la vendimia después de que el miércoles la empresa de servicios que tenían contratada les comunicase que no iba a mandarle las cuadrillas apalabradas. Y puede mantenerse en el tiempo, habida cuenta de que en la denominación de origen del oriente ourensano el 80 % de la recogida de la uva se hace a través de firmas que las bodegas contratan para tener mano de obra disponible mientras dura la campaña. Es un recurso cada vez más habitual, debido a múltiples factores, explican desde el sector. El fundamental es que faltan trabajadores locales. Muy pocas bodegas consiguen hacer la vendimia con gente de la zona. En el pasado muchos estudiantes aprovechaban la cosecha para ganarse un dinero antes de iniciar la etapa formativa, pero el adelanto en el inicio de las clases registrado tras la eliminación de los exámenes de septiembre lo hace incompatible. Otros acabaron renunciando a sumarse porque no querían tener un contrato de trabajo, por si interfería en sus becas o en cualquier otra ayuda. Las empresas se convirtieron así en el recurso más socorrido.

Desde el sector hay voces que critican la rigidez de las inspecciones de trabajo, más en este año en el que muchas bodegas y viticultores perdieron parte de la cosecha debido a los incendios del mes de agosto.

 Reunión de alcaldes de O Ribeiro con Trabajo

Alcaldes y representantes de varios municipios de la comarca de O Ribeiro se reunieron con la directora provincial de la Inspección de Trabajo de Ourense, Genoveva García Ballón, para trasladarle la preocupación vecinal por las inspecciones laborales coincidiendo con el inicio de la vendimia. En el encuentro, celebrado en un clima cordial, los regidores destacaron la tradición de colaboración altruista entre familiares, vecinos y amigos en las labores de vendimia, y expresaron sus dudas sobre la inseguridad jurídica que pueden sentir los viticultores ante la posibilidad de sanciones. Recordaron, además, las dificultades añadidas que afronta la comarca este año, como la plaga de flavescencia dorada, el mildiu, los incendios y el abandono de parcelas.

García Ballón explicó que las inspecciones son rutinarias y se realizan cada año para garantizar el cumplimiento de la normativa laboral, aunque mostró su disposición a colaborar con los ayuntamientos para informar y asesorar sobre las condiciones en que puede desarrollarse esa ayuda altruista. Los representantes municipales agradecieron su talante y reclamaron al Estado una mayor sensibilidad hacia estas formas tradicionales de cooperación en el rural gallego.