Patrocinado porPatrocinado por

La sequía dejará a España sin la mitad del cereal

Maruxa Alfonso Laya
M. Alfonso REDACCIÓN / LA VOZ

GANADERÍA

MORELL | EFE

Cooperativas Agro-alimentarias de España calcula que la falta de agua provocará que la cosecha de este año sea la mitad que la del anterior y que en nuestro país se produzca solo una cuarta parte de lo que se consumirá

19 jun 2023 . Actualizado a las 13:36 h.

El consejo sectorial de Cereales de Cooperativas Agro-alimentarias de España ha realizado una primera estimación de la cosecha de cereales que se recogerá en nuestro país este año. Tal y como se preveía, debido a la sequía que afecta a buena parte del país, los datos no son buenos, todo lo contrario. Se prevé una caída cercana al 50 % de la producción, que en algunas comunidades sera mucho mayor. Eso provocará que España solo produzca este año la cuarta parte de los cereales que consumirá. 

Según el informe elaborado por la cooperativas, la cosecha de cereales será de nueve millones de toneladas, frente a los 17,6 millones que se recogieron en el ejercicio anterior. Estos supone una caída del 48 %, que en algunas comunidades llegará a rozar el 70 % dependiendo del cultivo. Esta entidad también asegura que el rendimiento medio estimado será del 1,66 % y que un elevado volumen de hectáreas no se cosecharán por bajo rendimiento, porque cultivos como la avena, el centeno y el triticale se utilizaron para aprovechamiento ganadero.

Por cultivos, la avena, el centeno y el triticale serán los que experimenten una mayor caída. Del primero solo se cosecharán en España 123.204 toneladas, de las 862.771 que hubo en el 20232. Del segundo se recogerán 32.135 toneladas, frente a las 181.591 del pasado año. Y del tercero habrá algo más, 108.509 toneladas, cifra que queda muy lejos de las 572.898 toneladas del pasado año. Si comparamos estos datos con la media de producción de los tres últimos años, esto supone una caída del 90 % en el caso de la avena, del 89 %, en el del centeno, y del 86 % en el del triticale

El problema es que este descenso en la producción se experimentará también en otros muchos cultivos, que tienen una producción mucho mayor. Es el caso del trigo blando. Según las previsiones de las cooperativas, España cosechará 2,8 millones de toneladas, frente a las más de cinco que recogió el año pasado. Grande es también la caída de la cebada, que pasa de 6,5 millones de toneladas a 3,6 millones. La cosecha de maíz también se verá afectada, pues solo se recogerán dos millones de toneladas, frente a los 3,8 del pasado año. Por último, de trigo duro España recogerá 318.305 toneladas, casi la mitad que en el 2022. Si comparamos estos datos con las medias de cosecha registradas en los tres últimos años, la caída media en la producción ronda el 60 %. 

Para las cooperativas, la caída de la producción debida a la sequía padecida pone de manifiesto la necesidad de buscar nuevas técnicas y soluciones que mejoren el rendimiento de los cultivos y hagan frente a los desafíos del cambio climático. La investigación, la mejora genética y las nuevas variedades son, según esta entidad, las claves que tiene el sector para mejorar sus rendimientos. También son precisas políticas adecuadas de gestión del agua que garanticen el acceso sostenible a los recurso hídricos adecuados para la agricultura.

El problema de esta cosecha corta, es que España apenas producirá una cuarta parte de los cereales que consumirá. Según las cooperativas, los poco más de nueve millones de cereales que se cosecharán este año suponen solo una cuarta parte de los cerca de 35 millones que precisa este país para abastecerse. De ellos, 24,3 millones son para pienso, otros 5,5 millones para consumo humano, 1,1 millones más para semillas y 3,9 millones para otros usos. Teniendo en cuenta la estimaciones de las cooperativas, España precisará importar 34,9 millones de toneladas para abastecerse.«Una cosecha corta supone un gran reto de logística para el sector cerealista, que deben garantizar el normal y necesario suministro a lo largo de toda la campaña para cubrir las necesidades de consumo de la importante cabaña ganadera nacional», aseguran en esta entidad. También recuerdan la necesidad de una buena y organizada gestión y planificación que ayude a minimizar el impacto de la corta producción y favorezca la distribución de cereal a lo largo de toda la campaña de comercialización.

En cuanto a Galicia, las estimaciones de las cooperativas calculan que aquí se han plantado 12.918 hectáreas de trigo blanco, que producirá 29.711 toneladas, y otras 23.006 de maíz, donde se cosecharán 127.913 toneladas.