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Un remolcador controla el mercante incendiado en el Mar del Norte

Somos Mar REDACCIÓN / LA VOZ

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El Fremantle Highway se incendió en la medianoche del martes al miércoles frente a Países Bajos cuando transportaba unos 2.900 coches desde Alemania a Egipto
El Fremantle Highway se incendió en la medianoche del martes al miércoles frente a Países Bajos cuando transportaba unos 2.900 coches desde Alemania a Egipto Guardia Costera Países Bajos

Otros dos, un buque de salvamento y otro de recogida de combustible escoltan al Fremantle Highway

28 jul 2023 . Actualizado a las 11:49 h.

Poco después de las diez de la mañana de este viernes, la Guardia Costera de Países Bajos informaba de que el remolcador Fairplay 30 ha logrado una «conexión de remolque» (traducción automática del neerlandés) con el mercante panameño Fremantle Highway, de 200 metros de eslora e incendiado en la medianoche del martes al miércoles. A diferencia del Hunter, el remolcador que hasta el jueves aguantaba al carguero con una «conexión de emergencia», la del Fairplay «es más fuerte que la anterior». Esta mañana el carguero que transportaba unos 2.800 coches desde Alemania a Egipto «se desplaza 17 kilómetros al norte de Terschelling», controlado por el remolcador, de tal modo que lo separa de las rutas de navegación.

Al buque siniestrado también lo escoltan los remolcadores Guardian y Hunter, así como el buque de salvamento Multrasalvor 4 y el de recogida de combustible Arca, en previsión de posibles vertidos. Al mismo tiempo que los técnicos de «las empresas de recuperación monitorean la situación y recopilan información para un plan de recuperación», un avión de la Guardia Costera de Países Bajos sobrevuela por tercer día consecutivo el Fremantle Highway.

A bordo del mercante navegaban veintitrés tripulantes cuando se incendió. Uno murió y dieciséis resultaron heridos de diversa consideración, y todos fueron rescatados por helicópteros y embarcaciones, siendo trasladados a tierra, donde los supervivientes recibieron asistencia. El barco seguía ardiendo y todavía salía humo de su casco. Por tanto, prosiguen las labores de enfriamiento y no se considera «seguro» subir un equipo de salvamento a bordo.

Los gestores del siniestro marítimo «monitorean continuamente la dirección de la corriente y del viento para determinar la dirección de deriva más favorable» y facilitar el control del remolcador, añade la Guardia Costera de Países Bajos en un comunicado en neerlandés traducido automáticamente a español.