Recurre a Estrasburgo la decisión «política» del Constitucional de rechazar su petición de recabar pruebas e informes sobre la afectación de estos polígonos energéticos a los «stocks» de pesca
30 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La negativa del Tribunal Constitucional a admitir el recurso de amparo interpuesto por la Plataforma en Defensa da Pesca e dos Ecosistemas Mariños contra los planes de ordenación del espacio marino (POEM) no ha amilanado a la pesca española. Se ve «indefensa», pero no acobardada. Así es que, agotada la vía judicial en los tribunales españoles, ha decidido recurrir a Estrasburgo, al Tribunal Europeo de los Derechos Humanos.
La Plataforma ha presentado demanda por «vulneración del Derecho artículo 6.1 del Convenio Europeo de Derechos Humanos, que reza, recuerda, que «toda persona tiene derecho a que su causa sea oída (…), por un tribunal». Y las instancias españolas no han querido hacerlo, interpretan, pues el Supremo rechazó «nuestras pruebas de informes» relativos a «la afectación a caladeros de pesca, a la campaña del bonito, de la sardina, de la caballa, del boquerón, etcétera... que puedan tener las instalaciones de eólica marina con sus ruidos, vibraciones, cambios de corrientes, energías electromagnéticas de los cables» y demás. Asimismo, el colectivo había solicitado «informes sobre los stocks presentes en las zonas potenciales para la eólica marina y su situación biológica». Toda esa información fue «despreciada» por el Supremo, al descartar «de forma arbitraria» que toda esa información era «totalmente innecesaria y absolutamente desproporcionada», según palabras textuales del auto desestimatorio de estas pruebas solicitadas en su día en tiempo y forma.
Ante ese rechazo, la plataforma pidió amparo al Tribunal Constitucional, pero este se negó a admitir a trámite la demanda de los pescadores, «negándonos el legítimo derecho al acceso a los Tribunales para revisar la sentencia del Tribunal Supremo y su decisión de denegar a practicar las pruebas solicitadas».
El portavoz del colectivo, Torcuato Teixeira, verbalizó la decepción de todos: «Lamentamos la decisión, sin duda política, del Tribunal Constitucional que, de admitir a trámite nuestra demanda se vería abocado a anular los POEM». Por eso llevan «esta decisión arbitraria del Tribunal Constitucional a las instancias internacionales, en concreto al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, agotando así la última instancia judicial que teníamos disponible.
Los integrantes de la plataforma mantendrán en próximas fechas una reunión para decidir las acciones que realizarán tras esta demanda y valorar si emprenden nuevas movilizaciones para denunciar los planes del Gobierno de España «de subastar nuestros mares sacrificando al sector pesquero para el beneficio de los promotores de la eólica marina poniendo en peligro el sector pesquero, los ecosistemas marinos y la economía de muchas villas marineras dependientes del sector pesquero».