La isla de las tentaciones británica: una maldición que ya suma cuatro muertos

la voz REDACCIÓN

TELEVISIÓN

Tres concursantes y la presentadora del programa, similar al que triunfa en España, se suicidaron desde que empezó su emisión

19 feb 2020 . Actualizado a las 20:15 h.

El éxito de La isla de las tentaciones, el reality en el que varias parejas ponen a prueba su fidelidad delante de todo el país, ha sido arrollador en España. Pero el formato no es nuevo. En otros países, como el Reino Unido, ya se han emitido varias ediciones de un programa similar de la ITV, Love Island, que parece estar marcado por una negra maldición. Desde su creación, en el 2017, se han contabilizado ya cuatro suicidios. Tres de concursantes y el último, de la presentadora Caroline Flack, el pasado viernes, que conmocionó a los fans del programa.

Flack se hizo famosa por su trabajo en televisión, pero también por sus sonoros romances con personajes conocidos como el cantante Harry Styles, excomponente del grupo One Direction, uno de los rostros más conocidos del país, que tras su muerte le dedicó un emotivo homenaje en un concierto. 

El gran drama de la presentadora, de 40 años, fue que su vida sentimental superó a su trabajo y se volvió de alcance público, en particular su última relación con el extenista Lewis Burton. Los medios seguían de cerca la tormentosa relación de la pareja, que llegó a su punto máximo cuando él deportista la demandó por una agresión. Caroline Flack perdió su trabajo por culpa de este suceso, fue arrestada y estaba pendiente de juicio, a pesar de que la pareja se dio después una segunda oportunidad. Muchos echaron la culpa a los medios de la muerte de la estrella televisiva, a causa de la gran presión a la que estuvo sometida. En concreto, The Sun borró toda la huella de las informaciones que había publicado sobre ella después de conocerse la noticia de su suicidio.

Lo realmente estremecedor es que el suicidio de Caroline Flack es el cuarto que se produce en relación con Love Island. Antes de ella, otros tres concursantes se quitaron la vida en diferentes momentos durante los últimos años, lo que ha alimentado la leyenda negra sobre una supuesta maldición relacionada con el programa. 

La primera muerte de esta negra lista fue la de modelo y miss Reino Unido, Sophie Gardon, que participó en el programa en el 2016 y se quitó la vida dos años después, sin que se llegaran a conocer las causas. A los veinte días, su novio, Aaron Armstrong, también exconsursante y que fue quien halló el cuerpo, también se suicidó. En este caso, sus allegados aseguran que no pudo soportar la pérdida. 

En el 2019, otro exconsursante, Mike Thalassitis, fue hallado muerto con solo 26 años en un bosque de Londres. Se había ahorcado. Este exfutbolista se hizo famoso gracias al programa en el 2017. En este caso, parece que la pérdida de su abuela, a la que estaba muy unido, pudo estar detrás del fatal desenlace. En aquel momento, su amigo Mario Falcone dio alguna pista que puede estar detrás de esta triste oleada de muertes. «Mike pasó de ser un chico normal a una celebridad en seis meses. Es muy difícil lidiar con ello», aseguró. «Love Island tiene que abrir los ojos a esto».