El festival de cine de Tui concentra las miradas del audiovisual gallego durante el puente. En su primera jornada superó la barrera de los mil espectadores y, a tenor de los resultados del primer festivo del certamen, no parece arriesgado avanzar que se sobrepasarán con creces las 8.000 entradas que se registraron en la quinta edición. El grueso del público sigue estando en la población tudense y la de las áreas de Vigo y Oporto. En las butacas del teatro no faltaron personalidades como el conselleiro de Cultura, Roberto Varela, Xosé Manuel Beiras y Antón Lamazares, que siguieron el estreno de Un mar de piedra , la película sobre el escultor Manolo Paz.
Uno de los pesos pesados del cine documental aterrizó también ayer en el festival. Jay Rosenblatt, que hace un año presentó en Play-Doc su película Beginning Filmmaking , regresó al teatro municipal, esta vez como protagonista de una de las retrospectivas del certamen. «Es curioso porque normalmente la gente conoce más mis trabajos de collage y después descubre el resto pero, el año pasado presenté aquí uno de éstos últimos y ahora me encuentro con esta recepción a mi obra más popular, una agradable sorpresa», destacó el realizador. Como colofón, el directo de Batida, que llenó de ritmos «kuduro», samba electrónica y el rap más revolucionario, la sala Metropol desde medianoche. En la penúltima jornada del festival, con nueve proyecciones programadas, la atención se centra tanto en el único concierto en España que el sexteto «The Spinto Band» ofrecerá esta noche, como en la «Blogothèque». Cristophe Abric, el fundador del exitoso espacio virtual, famoso por sus «conciertos para llevar», también acudirá al festival.