La policía investiga para el fiscal la expulsión de israelíes de un restaurante de Vigo

e.v.p. / m.a VIGO / LA VOZ

VIGO

Instagram

La Brigada de Información de la comisaría de la ciudad gallega interroga al dueño del restaurante tras una denuncia por delito de odio que promovió un ciudadano desde Madrid

11 jul 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

La Brigada de Información de la Policía Nacional de Vigo ha abierto una investigación en relación al vídeo difundido en redes sociales que muestra a un hostelero del centro de la ciudad en el momento en que expulsa a media docena de comensales por ser israelíes el martes, día 9. En caso de que los agentes hallen indicios de un posible delito de odio, le remitirán un informe con sus conclusiones al fiscal de Vigo y su área especializado en esta materia.

Los agentes investigan la denuncia de un vecino de Madrid que telefoneó a la jefatura de la Policía Local para denunciar un posible delito de odio y ahora la comisaría ha abierto diligencias. Los agentes han citado en las dependencias al dueño del restaurante, Samir Slim, para interrogarlo, oír sus explicaciones y verificar si la identificación ha sido la correcta y si él se reconoce en las imágenes. El hostelero acudió en la mañana de ayer a presentarse al centro policial.

Una duda es si la policía ha localizado al grupo de turistas israelíes para tomarles testimonio porque, justo el día de los incidentes, habían arribado en el puerto de Vigo dos cruceros con miles de pasajeros que zarparon esa misma tarde. No consta que los afectados sean cruceristas, algo que se está averiguando.

La Embajada de Israel expresó ayer que considera «completamente inaceptable que en la España de 2025 se haya creado un clima que permita que se expulse a personas de un restaurante simplemente por ser israelíes».

Samir Slim en una imagen de archivo.
Samir Slim en una imagen de archivo. XOAN CARLOS GIL

«Estaban siendo agresivos y tratándome mal»

Su teléfono suena cada cinco minutos. Una llamada de Hungría, un número oculto, otro que no tiene guardado... Atiende este último. «Muchas gracias. De verdad. Gracias a la gente de Vigo y a la de España. Gracias. Esta es vuestra casa», dice a la persona que le ha contactado, sin conocerse. Samir Slim, un hostelero libanés que regenta en la ciudad tres restaurantes, es viral. El martes, expulsó a un grupo de turistas israelíes que tomaban unas cervezas en su terraza. «Palestina libre», les decía mientras recogía sus mesas. Él mismo grabó esta escena, «por seguridad, porque estaban tratándome mal», asegura dos días después. «Ellos eran diez y yo, solo uno. Soy hostelero. Sé cómo hay que tratar a la gente, pero había algo raro en su actitud. Filmé todo con una cámara que tengo dentro para la cabeza y por si la policía no llegaba a tiempo». La tensión entre el grupo y él era evidente.

El vídeo filmado en la terraza del italiano Mimassa, en pleno centro de Vigo, enseguida llegó a Líbano. Samir se lo envió a un familiar de Alemania y este lo reenvió a otros compatriotas. El miércoles, explotó en las redes sociales y en las plataformas de mensajería de España y de medio planeta. En estos tres días, el del restaurante de la calle Areal no para de sonar, mientras se disparan las reseñas de Google y los comentarios en el perfil de Instagram del negocio. «Muchísimas de ellas han sido de apoyo. Otras son insultos. Cuando llaman del extranjero o en número oculto, ya ni las cojo», dice.

El martes, Samir Slim estaba solo al frente del restaurante cuando llegó un grupo de diez personas a eso de las cinco de la tarde. El hostelero explica que enseguida notó que las cosas no iban bien. «Había algo raro en su actitud. Después, dieron patadas a las mesas. Me insistieron mucho en que la comida no llevara carne. Yo les dije: ‘'Tranquilos, los platos están preparándose y no tienen carne''», recuerda. Esta circunstancia le hizo preguntarles por curiosidad si eran turcos. «¿Cómo? Somos de Israel», respondieron ellos tajantes y con los ojos como platos, según Samir. La pregunta ofendió. «Ahí me di cuenta de todo. Por eso me estaban tratando así, mal. Aunque mi restaurante es italiano, yo tengo banderas de Líbano y la carta con detalles árabes».

La situación empeoró. El hostelero dice: «Les pedí con educación que se fueran porque no quería que las cosas empeoraran». Les dijo entonces que él pagaría todo. Entró en el local, cogió la cámara y un adaptador para la cabeza y comenzó a grabar. El encontronazo en este punto fue a más. «Si matáis en Palestina, os vais a comer a Gaza», reprochó Slim. «Fuera de aquí. ¡Viva Palestina libre!», alzó la voz. Reconoce que el grupo, al ver que estaba filmando todo, «se tranquilizó, pero al marcharse los hubo que gritaron ‘¡Viva Israel!' y una de ellas se quedó hasta el final mirándome mientras bebía la cerveza, ya que era gratis», asegura.

Desde el martes, Samir ha revivido muchas veces lo ocurrido para dar explicaciones. Ante la prensa, ante la policía, ante las personas que le llaman para saber cómo se encuentra... Ayer reabrió las puertas de Mimassa. Mujeres y hombres, jóvenes y mayores se paran a apoyarlo. «Eres un crac». «¿Estás bien? Enhorabuena, tío». «Tienes mi apoyo». Una mujer que pasa por delante le dedica más de tiempo. «Venía escuchando la radio esta mañana. Otra masacre más». Sin ahondar en los hechos, ambos sabían de qué estaban hablando.