La surrealista boda de Cañita Brava

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El bodorrio contó con 123 invitados y hasta tuvo cura, banquete, baile nupcial y tarta

09 ago 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Esta boda hay que tomársela con humor. Porque fue tan especial que es difícil entenderla, si no partimos de la base de que todo forma parte de un cachondeo promovido por un grupo de gente que solo quiere pasárselo bien. «Como hace bastantes veranos que no nos invitan a bodas decidimos organizar nosotros una. Montamos todo como si fuese de verdad: con el cura, desfile de invitados, banquete, baile nupcial, tarta... Llevamos cuatro años haciéndolo y esta vez quisimos que fuese todavía más original», explica Eduardo Sabajanes, desde Ardemil, una población cercana a Ordes.

La sorpresa del enlace de este verano fue que contaron con Cañita Brava como novio, lo que convirtió la boda en un bodorrio con 123 invitados y máxima expectación. «Todo el mundo se quiso hacer fotos con él y hasta cantó su famoso tema La Creación del amor, que fue aplaudido por todos», destacan. La novia de esta surrealista boda se llama Ana y trabaja en una empresa de transportes de autobuses. Me cuentan que estuvo brillante en su papel y que a Cañita se le vio muy cómodo a su lado, como si la creación del amor se hubiese hecho realidad. Quién sabe si lo que empezó como un juego acabará convirtiéndose en algo más.

CURA, CHURRASCO Y TARTA

Cañita vistió una elegante camisa blanca. Fue un momento ibicenco en Ordes. Se sumaron amigos de los organizadores y vecinos dispuestos a disfrutar de una boda sin parangón. Desfilaron por la localidad y montaron una misa en la que los novios se dijeron los respectivos «sí, quiero». Cuidaron detalles como la decoración, la música, la ambientación... Enfrente del Bar Uzal, que es el centro de operaciones del grupo, el mismo dueño tiene una nave, que fue donde se celebró el banquete con un menú que tuvo a Cañita y al churrasco como protagonistas. Los novios cortaron la tarta, bailaron el vals y lanzaron el ramo en busca de otra pareja que pase por el altar el año que viene. Los promotores de esta singular boda son los mismos que en otoño celebran el cocido a las nueve de la mañana. Forman parte de una cofradía que, de madrugada, empieza a prepararlo para tenerlo listo para desayunar. Está claro que a sentido del humor y originalidad es difícil superarlos. Y ahora con la boda de Cañita alcanzan otra dimensión en la organización de eventos que se salen de lo normal. Para el novio, el mes de agosto está siendo de lo más intenso. Tras protagonizar su propia boda se fue de viaje, pero no de luna de miel. «Tengo rodaje con Santiago Segura, que vuelve a contar conmigo para la nueva de Torrente. Hago de ministro y digo alguna frase que voy a previsar (improvisar en el idioma Cañita)», avanza desde Madrid. Hace unas semanas fue a las pruebas de maquillaje, y todavía le quedan varios días de grabación. Cabe recordar que Segura siempre ha contado con él y sus apariciones en la saga son de sobra conocidas por el público. Cañita puede presumir de formar parte del elenco de algunas de las películas más taquilleras de la historia del cine español. Lo que no sabemos es si Santiago Segura se interesará por la boda de Cañita, y el detective Torrente acabará apareciendo por el Bar Uzal de Ordes como invitado a una boda veraniega, a la boda más surrealista que se recuerda.