
Es lo penúltimo de la burbuja hamburguesera. Se trata de una burger de cocido que incorpora ingredientes del plato estrella del otoño-invierno gallego. La idea, la ejecución y el resultado final es obra de un carnicero y un hostelero que tienen sus respectivos negocios a apenas unos 20 metros uno de otro. Están, en concreto, en Os Campóns, Cambre, en el área metropolitana de A Coruña. «La idea es mía», afirma Pablo Iglesias, que desde hace 14 años está al frente de la carnicería Ana. Es una tienda de barrio que destaca por su apuesta por las carnes de calidad y ahora también con inventos como el que hoy presentan. «Lleva un 70 % de carne de vaca y la completo con lacón y panceta curada y chorizo. Lo pico todo junto y el resultado es muy interesante y una manera de tributar un homenaje al cocido», informa. Lo primero que hizo fue comunicárselo a su vecino-empresario-amigo que abrió en abril del 2024 Lucio's Burger Shop y que ya cuenta con una clientela fiel. Se llama Aldán, como la parroquia y la ría del mismo nombre de Cangas, y se apellida García Pérez. Dice que le encantó a su madre y así lo bautizaron. «Cuando Pablo me trajo la hamburguesa y la probé, de repente me vino al paladar el sabor de casa, del cocido de siempre», destaca. Entonces se puso a pensar qué podía hacer con ese trozo de carne y de qué productos acompañarlo. No era un reto fácil montar una buena hamburguesa de cocido.
MAYONESA DE GRELOS
Me dicen que le dio muchas vueltas. «Pensé en añadirle lacón deshilachado, pero se hacía muy salado y la convertía en una burger demasiado grande. Quería que fuese una propuesta más sencilla y que siguiese sabiendo a cocido», argumenta. Entonces se le ocurrió algo muy práctico. «Solo lleva una mayonesa de grelos y huevo cocido, queso de Arzúa y la citada carne de Pablo. El pan es de la panadería Do Pincho, de Carral, y es un pan de patata que es el que suelo utilizar en todas las variedades que propongo. A la gente le está sorprendiendo y gustando la hamburguesa de cocido», asegura. Vivimos un tiempo en el que hay más burgers que gente y siguen abriendo locales. Aldán dispone de un local pequeño en el que caben 18 personas y no admite reservas. «Por si alguien la quiere probar, trabajamos mucho para llevar. Nuestra idea a corto plazo, en dos o tres semanas, es tener lista una app propia e intentar repartir nosotros sin depender de otros. Nuestro radio de acción es O Burgo, O Temple, Vilaboa, el entorno de la ría, pero queremos llegar también a Carral», avanza.
Cada poco tiempo le gusta variar la carta e incorporar nuevas creaciones que, según la respuesta del público, mantiene más o menos tiempo en la oferta. No sabemos cuánto mantendrá la de cocido, pero cuando el frío apriete y empiece la temporada de este plato, seguro que la vuelve a incluir. Como suele suceder en estos casos, hay gente que ni se le pasa por la cabeza probar este tipo de novedades y otras que ya están pensando en desplazarse a Cambre. No sabemos lo que va a durar la burbuja de las burgers, pero la oferta en Galicia es alucinante, incluida esta con lacón, panceta, chorizo, grelos y queixo.