Para muchos estafadores, una tragedia como la dana es vista como una oportunidad de negocio. Según asegura el informático Manuel Redondo, estas personas se hacen pasar por organizaciones humanitarias o entidades sociales para conseguir dinero de forma sencilla
Plataformas como Wallapop o Vinted están obligadas a informar de la actividad que realizan sus vendedores, pero eso no significa que el fisco vaya a perseguir a todos los ciudadanos que las usan