Inquietud en el Sergas por los historiales de salud de esos 63.000 usuarios. Una posible salida para la Xunta, de asumir esos 63.000 pacientes, sería aumentar los conciertos con la sanidad privada
Adeslas, Asisa y DKV dan la espantada al considerar que las condiciones económicas que plantea el Ejecutivo central para el concierto son insuficientes