Hemeroteca (1977) | La autonomía de Galicia arrancó en Vilagarcía

Antonio Garrido Viñas
antonio garrido VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

Imagen de una de las manifestaciones que se celebraron, en este caso en Vigo, en Galicia
Imagen de una de las manifestaciones que se celebraron, en este caso en Vigo, en Galicia LLANOS

La primera jornada reivindicativa de toda la comunidad se celebró en la localidad arousana, con un acto al que concurrieron una decena de formaciones políticas y sindicales y que concluyó con una manifestación

14 nov 2023 . Actualizado a las 10:46 h.

Vilagarcía fue durante toda la dictadura franquista el escenario elegido para celebrar una de los actos fundamentales de exaltación del fascismo. Cada 17 de marzo se conmemoraba la fundación, por José Antonio Primo de Rivera en tal día de 1935, de la Falange Gallega en el Teatro Villagarcía de esa ciudad. En aquel acto, José Antonio había estado acompañado por grandes falangistas gallegos de aquellos tiempos y la ciudad repetía año tras año un homenaje al que en más de una ocasión acudieron ministros franquistas, que contaba con la presencia de las más altas autoridades jurídicas y militares y que, tras la obligada misa y los discursos de rigor, concluía con el personal entregado a cantar el Cara al sol.

Vilagarcía fue, por lo tanto, un lugar señalado en la historia falangista, pero también lo fue en la historia de la pelea por el Estatuto de Autonomía. Fue en la localidad arousana donde se celebró la primera jornada pro autonomía de Galicia. Una elección en la que seguramente tuvo mucho peso Luis Bouza-Brey Trillo, uno de los primeros dirigentes del Partido Galeguista, que estuvo preso en la isla de San Simón por sus ideas y que fue el encargado de cerrar los discursos en el acto celebrado en su lugar de nacimiento.

Cuenta la crónica publicada por La Voz de Galicia, y firmada por el corresponsal Ramos Barbeito, que fueron alrededor de tres mil las personas que acudieron al primer acto público en Galicia en pro del Estatuto de Autonomía, que se celebró el 26 de noviembre de 1977. «Numerosas banderas gallegas y pancartas con leyendas alusivas a la autonomía eran portadas por militantes de partidos políticos, afiliados a centrales sindicales y gallegos independientes que, como un solo hombre, se adhirieron a este acto preliminar de los que se realizarán posteriormente en el resto de Galicia», contaba la información de La Voz.

Fue el pabellón polideportivo el escenario escogido para un acto en el que una pancarta colgaba en la mesa presidencial con el siguiente lema: «Ergamos Galicia entre todos, autonomía pra Galicia». Lo firmaban las siglas AEM, AEUS, CC.OO, UGT, USO, MCG, PCG, PSG, PSOE, PSPG y UCDG. Había un par de pancartas más. Una de ellas, con la autoría del Movemento Comunista de Galiza (MCG), decía: «Pra que a autonomía non sexa un engano máis necesitamos elixir libremente o noso destino. Goberno galego, república federal». La otra llevaba la firma del Partido Socialista Galego (PSG), y en ella e se podía leer: «Autonomía, poder galego. Autodeterminación».

El primer orador fue el abogado vilanovés y uno de los fundadores del Partido Socialista Popular en Galicia Benito Pérez Dorgambide, que calificó el acto como histórico porque se habían aparcado los partidismos para «pedir todos xuntos a autonomía, para que o pobo sexa o que dirixa os seus destinos», subrayó el padre de la que años después sería alcaldesa de Vilagarcía con el PSOE, Dolores García.

Uno a uno fueron subiendo, a continuación, los demás oradores: Carmen Santos Castroviejo, Santiago Álvarez, Claudio López Garrido, Indalecio Tizón, Gonzalo Adrio Barreiro y Víctor Moro, todos ellos destacados dirigentes políticos de la época.

Cerró el acto un emocionado Luis Bouza-Brey. «Nada más parecer en el estrado una prolongada ovación premió a este hombre, que vio morir a sus antiguos compañeros. El largo aplauso hizo enmudecer al abogado que, con lágrimas en los ojos, pronunció su discurso. A lo largo del mismo tuvo que interrumpirlo para secarse más de una vez las lágrimas», relataba la crónica de La Voz. Bouza-Brey contó cómo fue la génesis del Partido Galeguista: «Foi en Vilagarcía onde Castelao e máis eu creamos aquel famosos eslogan: ‘Sinte en galego e pensa como queiras'».

Tras el discurso de Bouza-Brey los asistentes cantaron el himno gallego y luego arrancó la manifestación. Ojo a los nombres de las calles por las que discurrió, en un callejero con claro olor franquista: calle José Antonio, plaza de Calvo Sotelo, calle Alcalde Rey Daviña y Príncipe de España hasta concluir en la plaza de Ravella. Allí los esperaba el alcalde de Vilagarcía, José Luis Nogueira. Al regidor le entregaron quienes habían subido a la tribuna de oradores un escrito en el que se rogaba a la corporación municipal que se dirigiese al Estado español «en petición del derecho que históricamente le corresponde a Galicia, la autonomía y el poder». Nogueira, que llegó a ser vicepresidente de la Diputación de Pontevedra con la Unión de Centro Democrático (UCD) y director xeral de Presidencia de la Xunta preautonómica, prometió llevar el escrito al siguiente pleno. Luego, todos salieron al balcón de Ravella. Abajo seguían los gritos de «autonomía». El regidor cogió un megáfono, explicó a los manifestantes lo que había sucedido en el interior y con la interpretación del himno gallego concluyó el acto.