«La batalla del cabreo en las redes la he dado por perdida»

O GROVE

CESAR QUIAN

El monologuista y guionista de «El Hormiguero» actúa mañana en El Patio de O Grove

30 jun 2017 . Actualizado a las 11:57 h.

Fue uno de los pioneros y maestros de la moderna concepción del monólogo cómico. Locuaz, ágil y mordaz no tardó en ser reclutado como guionista y colaborador en programas de radio y televisión. En El Hormiguero lleva ya una cuantas temporadas. Y es precisamente a esa oficina a donde hay que llamarlo porque Vaquero no tiene teléfono móvil.

-¿No lo tienes ahora o nunca lo has tenido?

-Tuve un Panasonic un año. Y no, no era para mí. Hay veces que pienso que es la mejor idea, por ejemplo cuando llego el lunes y resulta que les han hecho currar a todos el domingo pero a mí no me han encontrado. Y otras pienso que soy idiota, porque algunos líos los habría solucionado con un simple llamada.

-Sin embargo sí que eres activo en redes sociales.

-Es que trabajo delante de un ordenador. En Twitter soy activo pero no interactivo. Escribo cosas pero no sigo a nadie, ni leo, ni contesto. El Facebook sí que me divierte.

-Utilizas siempre JJ. ¿No te gusta José Juan, tu nombre?

-Es que no había quien lo dijera bien. Era Juan José, José Javier... Y no es que me molestase pero verlo en los carteles me quedaba raro. Pero ya me he quitado el JJ también. Ahora soy solo Vaquero. Y resulta que ahora me llaman Vaquerizo. El otro día en Chanmartín un chaval me gritó ¡Mario! Es una batalla perdida.

-Hacía ya tiempo que no actuabas en O Grove. ¿Qué ha cambiado del Vaquero de la última vez?

-Puede que este es más tranquilo y está más feliz. Otra batalla que he dado por perdida es la del humor y los cabreos en las redes. En lugar de luchar contra eso me he vuelto un poco más blanco, intento no ir a la contra.

-¿Hay mucha diferencia entre el Vaquero real y el del escenario?

-Sí, claro. Pero hay tres o cuatro veces a la semana que sí que me parezco mucho al del escenario. Sí que tengo yo un viernes a la tarde que es como el del escenario. Pero también hay lunes, hay martes, voy a buscar a la niña al colegio...

-Televisión diaria, radios diarios, espectáculos los fines de semana. ¿Hay que aprovechar el momento?

-Sí, pero es que el momento ya se está alargando mucho. Tengo que parar, descansar y disfrutar de las cosas. Voy a arriesgarme y, aunque no voy a dejar lo que tengo, las cosas que se vayan acabando, como el programa de Nuria Roca, no las voy a sustituir. Es que dice mi mujer que ya se me nota mucho en el carácter.

-Como guionista ¿te da rabia que tu chiste se lo rían a otro?

-Todo lo contrario. Da mucha rabia que otro tío esté en el escenario con tus chistes y no se estén riendo. Te sientes muy responsable de que lo esté pasando mal. Y no puedes hacer nada. Así que por favor si alguna vez tenéis que dejar de reír con chistes que he escrito yo que sea cuando estoy yo en el escenario y no cuando está otro.

-Últimamente Pablo Motos ha recibido numerosas críticas por ciertos comentarios supuestamente machistas. ¿Cómo habéis vivido eso desde dentro?

-Con preocupación porque tengo clarísimo que Pablo Motos no es una persona machista. En El Hormiguero no cobra más un hombre que una mujer y la coordinadora de guiones es una mujer. Pero bueno, intentaremos no herir la susceptibilidad de nadie.