Ayudas de hasta 7.000 euros para hacer más atractivo conducir un coche eléctrico

Ana Balseiro
ana balseiro MADRID / LA VOZ

ECONOMÍA

CESAR QUIAN

El Gobierno da otro empujón a esta tecnología ampliando las subvenciones a particulares y empresas

26 jun 2024 . Actualizado a las 08:19 h.

Que el futuro de la movilidad limpia pasa por los vehículos eléctricos ya casi nadie lo duda. Sin embargo, el presente sigue resistiéndosele a esta tecnología por varios motivos. Uno de ellos, el elevado precio que todavía tienen los automóviles —en plena batalla de la UE con China por sus rebajas encubiertas para copar el mercado— y que, junto con la duración de las baterías y la insuficiente red de puntos de recarga, lastran la expansión de estos coches, que, según los datos de la patronal de fabricantes, apenas suponen un 5 % de las ventas totales y poco más del 9 % si se suman los híbridos enchufables. Por eso el Gobierno dio este martes un nuevo empujón a la movilidad eléctrica —algo que el sector de la automoción lleva tiempo reclamando, cada vez con mayor intensidad— y el Consejo de Ministros aprobó una nueva batería de medidas con las que incentivar las ventas entre particulares y empresas.

En total, según anunció la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, se movilizarán 626 millones de euros. Estas son las principales medidas:

moves III

Prórroga hasta el 31 de diciembre. El plan de ayuda a la compra de vehículos eléctricos, el bautizado como Moves III, que expiraba en julio, se extenderá hasta finalizar el año. En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Montero explicó que el objetivo es que la población «tenga una nueva oportunidad para la compra del vehículo eléctrico» en el segundo semestre. Cabe recordar que esta prórroga llega en un momento en que todavía no se ha agotado la cuantía presupuestada para la primera mitad del año: quedan sin gastar en torno a 112 millones de euros.

El programa de ayudas arrancó en abril del 2021 con una cuantía inicial de 400 millones de euros, con cargo a los fondos europeos. Según los datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), que es el organismo que canaliza las subvenciones —aunque son las comunidades autónomas quienes las conceden—, fue en noviembre del 2022 cuando se alcanzó el máximo movilizado: 1.200 millones. Ahora se sumarán unos 200 millones más.

cuantía

Hasta 7.000 euros en un mercado que frena. ¿En qué consisten las ayudas? En subvenciones de hasta 7.000 euros para particulares que adquieran turismos eléctricos o de hidrógeno, achatarrando uno de combustión. De no hacerlo, la ayuda se reduce a 4.500 euros. En el caso de híbridos enchufables, la cuantía se eleva a 5.000 euros (la mitad sin achatarramiento). Eso sí, el precio del nuevo vehículo no puede rebasar los 54.450 euros.

Los límites subvencionables varían para las furgonetas (hasta 9.000 euros) y el resto de los vehículos a motor, como las motocicletas (hasta 1.300).

A estas ayudas directas —es importante no olvidar que tributan, es decir, hay que consignarlas en la declaración de la renta como incremento patrimonial— hay que sumar la deducción fiscal aprobada el pasado año por el Ejecutivo. En concreto, posibilitaba una rebaja de hasta 3.000 euros en el IRPF por la adquisición de turismos eléctricos de hasta 54.450 euros.

flotas

450 millones en ayudas. Junto a las ayudas para que los particulares renueven su coche comprando un eléctrico, el Ejecutivo también destinará hasta 450 millones a apoyar la transformación de las flotas de vehículos pesados para el transporte de mercancías y pasajeros por carretera.

En concreto, habrá una nueva partida de 50 millones para el citado programa de transformación de vehículos pesados por carretera.

incentivo fiscal

Libre amortización. El decreto aprobado este martes, que prorroga las medidas anticrisis, incluye un nuevo incentivo fiscal para las empresas y los autónomos, de modo que para facilitar el cambio de la flota de vehículos de combustión a eléctricos a las empresas se les permitirá la libre amortización de las inversiones que hagan este año y el próximo en vehículos eléctricos e infraestructuras de recarga a través del impuesto de sociedades (el que abonan sobre los beneficios obtenidos). Lo mismo podrán hacer lo autónomos, en su caso en el IRPF.

presión del sector

Reclama eficacia y agilidad. La ampliación del respaldo económico al despliegue de la movilidad eléctrica ha coincidido con un momento de enfrentamiento abierto del sector con el Ejecutivo, al que ha acusado de no poner en marcha las medidas que esta industria precisa.

El punto culminante del malestar de la patronal fue la reciente dimisión de Wayne Griffiths como presidente de Anfac, la patronal de fabricantes, que hace dos semanas, en la asamblea general, achacó su decisión a la «inacción del Gobierno en favor de la electrificación».

«En diciembre renové como presidente de Anfac porque el Ejecutivo se comprometió a ser un aliado, y a poner en marcha rápidamente medidas concretas y eficaces. En el Foro Anfac del pasado febrero, el presidente del Gobierno también se comprometió a revisar el Plan Moves y a impulsar la infraestructura de recarga. Estas medidas no han llegado», explicó.

«Mi objetivo era y es convertir a España en un hub de la movilidad eléctrica en Europa, porque nada importante se consigue sin alianzas estratégicas ni colaboración. Desde hace tiempo, el compromiso de los representantes políticos no está a la altura de lo que merece nuestro país, segundo fabricante de coches en Europa y octavo del mundo», reclamó. Aunque la patronal valoró positivamente las ayudas, las sigue considerando insuficientes y poco ágiles.