«He dormido poco y he comido menos», dice sobre sus días de reflexión
30 abr 2024 . Actualizado a las 22:51 h.En apenas tres días, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pasado de plantearse la dimisión como jefe del Ejecutivo a garantizar que cumplirá los tres años de mandato que le restan y aspirará a seguir siendo el candidato del PSOE en las próximas elecciones generales. «Mientras yo tenga ganas y los ciudadanos lo quieran, lo voy a hacer», aseguró Sánchez en una entrevista en la cadena Ser. El líder del PSOE admite que lo ha pasado muy mal en los cinco días de reflexión que se había autoimpuesto para decidir sobre su futuro y que hubo momentos en los que realmente pensó en abandonar el cargo. «Creo en el poder transformador de la política, pero llega un momento en el que esta campaña de difamación política de la vergüenza me llevó a plantearme si continuar o no», reconoció.
Un problema «muy serio»
Durante su retiro voluntario, el jefe del Gobierno asegura que ha llegado a dos conclusiones. La primera es la existencia de un problema «muy serio» con la democracia, «que no es un problema solo de España» y la segunda es que da un paso adelante en el «compromiso de la regeneración democrática».
«He dormido muy poco y he comido menos», dijo sobre su estado durante estos cinco días. Explicó que no consultó con nadie a la hora de escribir su carta dirigida a toda la ciudadanía. «Ni a mi mujer, que fue la primera que me dijo que no dimitiera», relató Sánchez.
Tal y como hizo el pasado lunes y como afirmaba en su misiva del pasado miércoles, señaló a la desinformación como uno de los principales problemas de la democracia en España. «He sido una víctima más de una estrategia bien diseñada y de una maquinaria del fango muy engrasada», afirmó sobre los ataques que han sufrido él y su esposa, Begoña Gómez por «pseudomedios» de información. «Creemos que la desinformación nos viene de fuera y resulta que dentro, tenemos el caballo de Troya», afirmó.
Financiación de los medios
El presidente del Gobierno insistió en la necesidad de una regulación sobre las páginas web que fabrican y difunden bulos aunque evitó dar detalles sobre sus planes al respecto, más allá de abrir la puerta a reforzar la ley que regula la financiación pública de los medios de comunicación.
El presidente del Gobierno Insistió en que a pesar de todo confía en la justifica, en la separación de poderes «y en los medios de comunicación», «no en los pseudomedios de comunicación», precisó. A su juicio la movilización social es clave para encarar el necesario debate sobre la regeneración democrática que él se ofrece a liderar. «Hay movilización social de rechazo a la conductas de utilización de las mentiras», señaló en jefe del Ejecutivo.
«El artículo 20 de la Constitución dice que los ciudadanos tienen derecho a tener una información veraz. La información en democracia es fundamental, pero si se confunde la verdad con la mentira se convierte en enemigo público número uno y estamos pervirtiendo la democracia», explicó. El líder del PSOE se congratulo de que haya «hay muchos ciudadanos fuera de la política que están dispuestos a aportar en un debate muy necesario si no queremos una deriva».
«Yo he sufrido lawfare (guerra jurídica) sin dudas en España», explicó, afirmando que su Gobierno es el que ha acabado con la llamada «policía patriótica» que se terminó con su llegada al Ejecutivo a través de una moción de censura al Gobierno de Mariano Rajoy. Defendió por ello su lucha contra la corrupción y lamentó no escuchar al PP «decir lo siento, cometí un error».
El líder socialista rechaza dar explicaciones sobre su mujer porque la acusación «no está contrastada»
El presidente del Gobierno se refirió a la apertura de diligencias tras la denuncia a su esposa, Begoña Gómez por parte del pseusosdindicato Manos Limpias en la que los propios denunciantes admiten que puede estar basada en noticias falsas publicadas por medios de comunicación. «Si entra a la cuestión a mi esposa, puedo tener mi opinión, pero soy presidente del Gobierno y cuando ha habido casos de corrupción con el caso Koldo he actuado en consecuencia», señaló. «No acepto la impunidad, pero confío en que las personas inocentes lo demuestren. Hasta los propios demandantes dijeron que había información no contrastada y que tendrían que ser esos medios de comunicación los que tendrían que analizar por qué han acusado a mi esposa», precisó el presidente.
Según indicó, la petición de investigar a Begoña Gómez «está basada en informaciones periodísticas no contrastadas y sin indicios de su intervención».
«Maquinaria del fango»
Tal y como hizo en su comparecencia pública en la que anunció que seguirá como presidente del Gobierno, afirmó que el problema de la desinformación no es solo suyo, sino que va más allá. Explicó que se ve «una víctima más de una estrategia bien diseñada, fríamente planificada, y de una maquinaria del fango muy engrasada».
«Ya lo dijo Aznar. Quien pueda hacer, que haga», recordó, al tiempo que acusó al líder del PP, Alberto Núñez Feijoo, de haber dicho que España se merece un Gobierno democrático, lo que implica que, a su juicio, el suyo no lo es. «Se quiere hacer caer un Gobierno con la guerra del fango», aseguró. No aportó sin embargo detalles sobre las medidas judiciales que podrían adoptarse para actuar contra los bulos y la desinformación.
Respecto a la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), bloqueada por el PP desde hace cinco años, indicó que el PSOE aceptó «la propuesta de que hubiera una mediación de la UE», pero si el PP continúa con el secuestro «la democracia, el Parlamento necesitará articular mecanismos para poder sacar de esta situación tan lamentable en la que le ha metido el PP al gobierno de los jueces». Aclaró por último que desconocía que el CIS estuviera elaborando una encuesta durante sus cinco días de reflexión. «Yo no tenía conocimiento de que se estaba haciendo este estudio. Más allá del impacto electoral, yo tenía que hacer una reflexión personal», relató.