Las universidades gallegas imparten duplicadas 25 de sus 108 titulaciones

Tamara Montero
tamara montero SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

M. MORALEJO

Hay más grados de Enfermería que campus en Galicia y Empresariales se oferta en cinco ciudades distintas

19 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Cinco. Es la cifra mágica de grados que pueden escoger los que se preinscriben en la universidad tras haber superado la prueba de acceso. Cifra mágica que puede llegar a diez en el caso de que se trate de titulaciones iguales impartidas en diferentes centros. Un alumno que aspire a estudiar Enfermería casi puede completar esa lista solo con la oferta que hay en Galicia. De hecho, hay más enfermerías que campus: ocho grados para siete campus, porque en Vigo el título se divide entre Enfermería en el Meixoeiro y en Povisa. Es el ejemplo más extremo de un problema que intentará atajar el rediseño del mapa de titulaciones, cuyo proceso arrancó el martes con la primera reunión entre la Consellería de Educación y los vicerrectores de las tres universidades en la que se estableció el calendario de trabajo para contar con un nuevo catálogo el próximo año.

Es el de Enfermería el caso más llamativo, pero otras 24 titulaciones -incluyendo en este caso las simultaneidades entre dos carreras que ofertan algunas facultades- están presentes en más de un campus gallego. Es decir, casi uno de cada cuatro grados que se imparten en Galicia están duplicados, ya sea en diferentes universidades o incluso dentro de la misma institución. Es, por ejemplo, el caso de Administración e Dirección de Empresas, una carrera que ofertó la nada desdeñable cifra de 869 plazas repartidas entre cinco campus de las tres universidades: A Coruña en la UDC, Santiago y Lugo en la USC, y Ourense y Vigo en la UVigo.

En cinco de los siete campus está también presente Relacións Laborais, que ofertó este año más de 400 plazas de nuevo ingreso. Y en cuatro de lo siete se imparten las titulaciones de Dereito, Mestre en Educación Infantil y Mestre en Educación Primaria. En todas se da la circunstancia de que está duplicada en la misma universidad. Es decir, se oferta en dos campus de la misma institución.

La de la repetición de carreras dentro de la misma comunidad es una de las ineficiencias a las que se han estado refiriendo las autoridades académicas desde hace tiempo, pero también hay que mirar con lupa por qué se ha llegado a esta situación. Y en algunos casos, si se adentra uno más allá del primer vistazo superficial se pueden encontrar argumentos de peso para duplicar titulaciones. «Filoloxía Galega está nas tres universidades, pero é que aquí é o único sitio do mundo onde se pode estudar», remarca el vicerrector de Comunicación de la Universidade de Santiago, Xosé Pereira.

Las siete escuelas de Enfermaría también tienen su razón de ser, porque obedece a una estructura que nace de las diputaciones «e que tiña sentido no seu momento». Y la duplicidad de Dereito, añade, no es tal. No lo es porque el grado de Vigo «ten un enfoque económico que nós non temos, por exemplo», explica Pereira.

Hay demanda

También es cierto que no hay una relación directa entre el número de grados que se repiten en el sistema universitario gallego y la demanda de esas titulaciones. De nuevo, rompe los moldes Enfermaría. Ocho grados en siete campus. Se ofertaron un total de 558 plazas para iniciar los estudios. Hubo demanda de sobra. Cerraron matrícula los ocho grados. Y lo hicieron casi al mismo tiempo. Seis de los ocho títulos ofertados completaron sus plazas de nuevo ingreso en el cuarto llamamiento para matrícula. Los estudiantes suelen tardar en formalizar la inscripción porque esperan a ver si hay plazas en Medicina.

Lo mismo ocurre con Administración e Dirección de Empresas. Completado el último plazo de matrícula del que se encarga la Comisión Interuniversitaria de Galicia (CIUG) tan solo quedaban plazas en Lugo, Ourense y Vigo. Además, la ocupación del primer curso estaba, en los tres casos, por encima del 60 %.

Caso distinto es el de Filoloxía Galega, con poca demanda, o el de Humanidades, con una ocupación -antes de la oferta de vacantes que hacen las universidades- inferior al 40 % tanto en Ferrol como en Lugo, que reaccionó a la falta de matriculados reconvirtiendo su carrera en Ciencias da Cultura y ofertándola también como semipresencial.

Unas instituciones eficientes, adaptadas a la Galicia del futuro e internacionales

El reto es ambicioso. Una reforma en profundidad del actual catálogo de titulaciones del sistema universitario gallego que además siente las bases de su evolución en el futuro. La universidad gallega que viene será más eficiente, tendrá vocación internacional y estará adaptada a los retos y necesidades de la sociedad en la que se mueve.

Más eficiencia

Carreras con tirón. Hay carreras que no tienen demanda. Es un hecho que se constata todos los años. Uno de los objetivos de esta reforma del sistema universitario es adecuar la oferta a la demanda, un camino que se inició hace ahora un lustro con el decreto de titulaciones, que establecía un mínimo de alumnos para que las titulaciones fuesen viables: 50 en los campus principales y 45 en los periféricos. Los másteres, además, deben tener al menos 20 alumnos para sobrevivir. Y de aquellos polvos, estos planes de viabilidad. Veintitrés grados están bajo la lupa para ver si deben continuar impartiéndose. Aquellos grados considerados singulares seguirán existiendo sin importar a cuántos alumnos atraigan. Es el caso de Filoloxía Galega y Filosofía, por ejemplo. La Xunta también plantea la puesta en marcha de medidas correctoras para aquellas titulaciones que están duplicadas y la valoración de la demanda en la simultaneidad de grados que se han venido ofertando en los últimos cursos con bastante éxito.

Especialización

Polos de atracción equilibrados. Las universidades también han venido trabajando en la especialización de sus campus en diferentes campos de conocimiento. La USC ha optado por las ciencias de la vida en Santiago y las de la tierra en Lugo. La investigación oceanográfica la lidera Vigo, que centra sus esfuerzos en comunicación y cultura en Pontevedra y en aprovechamiento y gestión del agua en Ourense. A Coruña creará en Ferrol un polo de atracción en el sector industrial y seguirá apostando por la arquitectura en A Coruña. Esa especialización tiene que venir acompañada de equilibrio entre ellos, de una oferta adaptada a las necesidades actuales y futuras de Galicia y de una voación internacionalizadora. También se apostará por impulsar títulos interuniversitarios y de aquellos que fomenten el espíritu emprendedor y el autoempleo.