Los peajes de la AP-9 serán los terceros que más subirán en España a partir del día 1

GALICIA

M. Moralejo

Las tarifas de la autopista gestionada por Audasa se incrementarán en un 6,55 % y los de la AP-53 en un 5,07 %. Viajar de Ferrol a Tui subirá 1,55 euros y llega a 25,55 con su segundo mayor encarecimiento en lo que va de siglo

31 dic 2023 . Actualizado a las 14:46 h.

El 2024 marcará un hito en la historia de la AP-9: el de la segunda mayor subida en el precio de sus peajes en lo que va de siglo. El Ministerio de Transportes validó ayer un incremento en la principal vía de comunicación de Galicia del 6,55 % de media entre todos sus tramos, pero que en realidad llegará a un 6,69 % para quienes la recorran en toda su extensión, de Ferrol a Tui. Dicho viaje pasará a costar 25,50 euros para vehículos ligeros y nada menos que 44,5 para los pesados.

El Ministerio de Transportes esperó hasta el último fin de semana del año, como hace habitualmente, para comunicar que la AP-9 estará entre las infraestructuras viarias que más se encarecerán de todo el país, como ya viene sucediendo desde hace siete años contando ya el próximo ejercicio. La principal arteria de comunicación gallega subirá sus tarifas un 6,55 %, solo 0,10 puntos menos que la AP-46 (la malagueña autopista de Las Pedrizas) y la AP-7 entre Alicante y Cartagena. Frente a la dinámica que sitúa al vial gestionado por Audasa entre los que más han subido sus precios, la AP-53 (Santiago-Alto de Santo Domingo) verá incrementados sus peajes en un 5,07 %, aunque no es de las que menos suben, ya que esa posibilidad se concede a la AP-66 (León Campomanes) que verá aumentados sus peajes de media un 5 % para el nuevo año.

En todos los casos se superará el índice de precios registrado por el sector de las autopistas entre octubre del 2022 y el mismo mes de este año, fórmula que se utiliza para actualizar las tarifas cada ejercicio. Ese IPC se situó en un 4,03 %, pero el Gobierno central ha activado la recuperación del tramo de subida que frenó en el 2023 en todas las concesiones, limitando el incremento al 4 % y haciéndose cargo a cuenta de las arcas del Estado de los porcentajes restantes a los que tuvieran derecho las concesionarias. En el caso de la AP-9 la subida para el ejercicio que termina tenía que haber sido del 9,46 %, pero como en las demás concesiones, se limitó al 4 % para los usuarios. Ahora, el Ministerio de Transportes ha añadido a la subida una primera parte de lo perdonado en el 2023 y lo mismo hará durante los dos próximos ejercicios, con lo que los peajes de las autopistas sufrirán un encarecimiento progresivo hasta el 2026 incluido por encima de lo que depare el IPC.

En el caso de la AP-9 este seguirá siendo incluso mayor hasta el año 2038, cuando finaliza el plazo otorgado a Audasa para que se cobre y con intereses del 8 % la inversión realizada para la ampliación de la autopista en el puente de Rande y en la circunvalación de Santiago puestas en servicio en el 2017. Esa operación garantiza a la concesionaria una subida extra y acumulativa cada uno de los 20 años pactados del 1 % en los precios de los peajes, aunque el Gobierno ha rebajado dicha factura en unos 41 millones de momento al desviar a ese fin los montos no gastados en las bonificaciones aplicadas en la AP-9 desde el 2021 y que hacen que el regreso sea gratis para los vehículos ligeros si abonan las tarifas con dispositivo de telepeaje y el retorno se realiza en menos de 24 horas en el mismo tramo.

Transportes defiende las subidas por encima del IPC alegando que es una forma de mitigar la aplicación del encarecimiento diferido este año, y que de no hacerlo en tres ejercicios, en lugar de subir el 1 de enero la AP-9 un 6,55 % tendría que hacerlo un 10,43, y lo mismo en la AP-53, en vez de un 5,07 % un 8,41. Adelanta que en ambos casos se introducirán más descuentos en el 2024, fruto del pacto de investidura acordado entre PSOE y BNG. Pero no aclara el ministerio si esas bonificaciones se aplicarán desde el día 1 del nuevo año, o en cambio habrá que esperar que se aprueben los Presupuestos Generales del Estado y se habiliten las partidas necesarias en dichas cuentas, tal y como figura en el acuerdo firmado entre socialistas y nacionalistas. 

Las nuevas tarifas llevarán los peajes entre A Coruña y Santiago a 7,95 (0,50 euros más que en la actualidad); A Coruña-Ferrol a 5,60 (+0,35); Santiago-Pontevedra pasará a 6,80 (+0,40); Pontevedra-Vigo sube a 4,60 (+0,30), y hacer todo el recorrido entre Ferrol y Tui llegará nada menos que a 25,55 (1,55 euros más que hoy). En el caso de la AP-53, la subida hará que el coste de recorrerla pase de 6,40 euros A 6,70. 

Por otra parte, el 1 de enero entrarán en vigor los presupuestos autonómicos y con ellos gran parte de las medidas anunciadas durante los últimos meses por la Xunta. El efecto de algunas de ellas se dejará sentir desde el primer día. Es el caso de la congelación de los peajes en las autopistas autonómicas, la AG-55 entre A Coruña y Carballo y la AG-57 entre Vigo y Baiona. La Xunta destinará 5,5 millones de euros para evitar el impacto del IPC en ambas vías, que según el Gobierno gallego son «as máis baratas de España» gracias a las bonificaciones que se aplican desde el 2010.