Falsificaciones y demoras tensionan en Cuba la obtención del pasaporte español

Carlos Punzón
Carlos Punzón VIGO / LA VOZ

GALICIA

La embajada de España en La Habana, en una imagen de archivo.
La embajada de España en La Habana, en una imagen de archivo. JOSE GOITIA. CANADIAN PRESS

Detectan un alto número de partidas falsas de nacimiento y bautismo de emigrados a la isla en los siglos XIX y XX para lograr ahora la nacionalidad

14 may 2025 . Actualizado a las 12:00 h.

Quedan 160 días para que los nietos y bisnietos de quienes emigraron un día de España logren entrar en el proceso que les abre la puerta a conseguir la nacionalidad española a cuenta de la Ley de Memoria Democrática. Cerca de 300.000 descendientes ya han logrado el pasaporte, unos 600.000 han presentado la solicitud, y se estima que, al menos, otro medio millón podría hacerlo todavía. En el que es ya tercer y último año habilitado para acogerse a la puerta abierta por la ley aprobada en el 2022, los trámites se han ido afinando y automatizando en focos de especial trascendencia como Buenos Aires, el de mayor demanda, mientras la angustia de quienes quieren entrar en el proceso se dispara en Cuba, la que se ha convertido en la segunda mayor plaza de nacionalizaciones a tramitar.

Decenas de chats en canales de mensajería móvil de WhatsApp y Telegram o páginas en redes sociales diversas, dan cuenta de una mezcla de desinformación, falta de medios y problemas que miles de cubanos manifiestan a diario con sus preguntas y misivas buscando ayuda para tratar de conseguir la nacionalidad. La falsificación masiva de partidas de nacimiento y bautismo de emigrados españoles a la isla en los siglos XIX y XX, o incluso de personas que nunca han existido pero de las que se certifica artificialmente un vínculo de origen con España, están haciendo que el proceso esté resultando más delicado en Cuba.

Leandro Báez, hijo de cubanos afincado en Ourense que gestiona una docena de chats para resolver dudas o informar a casi 12.000 usuarios inscritos en ellos sobre cómo obtener la nacionalidad española, atestigua haber visto un número notable de falsificaciones que no hacen otra cosa que añadir filtros de seguridad y ralentizar el proceso. «Hay mucha angustia en Cuba al acercarse el fin de plazo para obtener la nacionalidad. Si a eso se suma que varios arzobispados españoles como los canarios, el de Oviedo, Mallorca o Barcelona están cobrando 77 u 80 euros por una fe de bautismo, como es una cantidad que la mayoría de los cubanos no pueden pagar, deja una vía libre a los grupos que se aprovechan de la buena fe y la necesidad de la gente para venderles certificados falsos», atestigua Báez. «Es un mal generalizado. Los he tenido en mis manos y me quedo pasmado, porque muchos son casi perfectos, y con uno que pase se pueden beneficiar hasta 50 familiares». Añade que la picaresca surge también porque asegura haber comprobado que registros civiles como los canarios no admiten ya peticiones de bisnietos de emigrados, aunque la Ley de Memoria Democrática los incluya como nacionalizables. «Yo mismo he realizado peticiones allí y me contestan que como máximo atienden las de nietos como máximo grado», asegura.

«Existe una preocupación general acá, por los retrasos en obtener algunos documentos en los registros civiles, por las dificultades en la energía eléctrica...», va enumerando desde La Habana Dulce, una descendiente de españoles que ha remitido ya sus documentos al consulado y confía en completar el trámite. «Es complejo, pero unas veces por las condiciones propias y otras por el mal funcionamiento de compañeros que hacen difícil el camino... Yo espero que todos los que de veras somos descendientes logremos satisfactoriamente terminar como españoles», expresa.

Desde la asesoría jurídica MB de Cuba coinciden en que «es un proceso bien complicado, pero todo el que se lo proponga, llega. Quien no lo ha hecho en estos dos años es dejadez o le apareció tarde el ascendente español», comenta una abogada de la firma de apoyo legal.

Quienes cuenten con cita podrán seguir con su petición aunque remate el plazo

El Centro de Descendientes de Españoles Unidos (CeDEU), plataforma creada en Argentina que fue fundamental para que los nietos de emigrantes y sus descendientes puedan acceder a la nacionalidad, advierte que aunque la ley marque el 22 de octubre como fecha tope para tramitar la petición de nacionalidad, las solicitudes seguirán tramitándose durante meses e incluso años hasta que se resuelvan todas.

«Es recomendable que cada interesado ingrese a la página del consulado español correspondiente a su domicilio, para poder conocer de primera mano el sistema de usuario consular que tienen, así como en detalle la documentación a presentar y el sistema de citas», recomienda Juan Manuel de Hoz, portavoz de CeDEU.

«Hay quienes quieren instalar en la opinión pública la creencia de que si una solicitud de nacionalidad no es resuelta antes del plazo máximo para las peticiones marcado en la ley, o si no se tiene turno antes de esa fecha, se queda fuera. Estas opiniones o declaraciones están fuera de la realidad de una ley generosa y una voluntad y decisión del Gobierno español de que todos entren su trámite», considera De Hoz. Insiste en que lo importante es lograr una clave de usuario o de tramitación antes de que acabe el plazo, para luego obtener cita y desarrollar el proceso.

La Ley de Memoria Democrática del 2022 establece quienes tiene derecho a solicitar la nacionalidad como descendientes de españoles: 

  • Los nietos de un originario español, independientemente de que se hayan naturalizado en el país de acogida.
  • Los nietos que quieran recuperar la nacionalidad y que la perdieron por no ratificarla a su mayoría de edad. 
  • Los hijos mayores de aquellos nietos que ingresen por esta normativa, es decir bisnietos de españoles, independientemente de cuando les fuese reconocida la nacionalidad.
  • Los hijos de mujeres españolas casadas con un no español. 
  • Bisnietos con ascendencia española ya fallecida.
  • Se abre la vía de salto generacional directo a los bisnietos siempre que el nieto estuviera fallecido y no haya accedido ni por esta ley ni por la anterior del 52/2005, y para ese caso concreto por la vía del bisabuelo varón que haya mantenido la nacionalidad hasta el nacimiento de sus hijos.

«Quienes hagan su respectivo usuario consular antes del 22 de octubre tienen garantizada la posibilidad de presentación de su trámite aún cuando la fecha fijada para dicha presentación sea posterior a esa fecha», insiste De Hoz. Para él está claro que «sabemos que la demanda es grande; se estiman casi 1.5millones de nuevos españoles , y hay que destacar que el Gobierno español ha aumentado sus medios materiales en diversos consulados. Hemos visto procesos de ampliación de sus plazas y además son conscientes de las necesidades y que estas son dinámicas». Mantiene el portavoz de la plataforma que ahora depende de los propios canales burocráticos oficiales de comunicación internos de la propia Administración española para centrarse en resolver las particularidades de cada legación sobre sus recursos para reforzarlos en caso de ser necesario.

En Cuba, según Leandro Báez, el consulado de La Habana empieza a dar cita ahora a quienes la solicitaron hace un año.