El Celta tira dos puntos en Mallorca (1-1)

Xosé Ramón Castro
X. R. CASTRO VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

MIQUEL BORRÂS - LOF

Los vigueses tenían el partido controlado en el minuto 85 pero no marcaron el segundo y un error defensivo permitió empatar a los baleares

23 ago 2025 . Actualizado a las 19:17 h.

El Celta sumó el primer punto de la temporada, pero, en realidad, perdió dos. Porque tenía controlado el partido ante un Mallorca que solo recurría a los centros laterales y, en el minuto 85, del 0-2 se pasó al 1-1 definitivo. Fran Beltrán se plantó solo en el área rival, pero se frenó y perdió la opción de marcar, y en la jugada siguiente, un desajuste defensivo en cadena permitió a Mateu Jaume disparar a placer dentro del área y empatar el encuentro. Y la cosa todavía pudo ser peor para los vigueses, que quedaron en la lona tras encajar el golpe. A los célticos les costó mantener el ritmo en los minutos finales. El calor también pasó factura.

No lo estaba pasando bien el Celta en Mallorca. Los balones a la espalda de los centrales y los desajustes defensivos estaban haciendo crecer al cuadro local después de un inicio equilibrado de partido. Pero en el momento más complicado, la tropa de Giráldez demostró que el contragolpe es su mejor arma. Manu Fernández interceptó el ataque bermellón, Hugo Sotelo supo aguantar el balón y medir el tiempo para meter un pase preciso para la cabalgada de Javi Rueda, una de las seis novedades en el once, para que el malagueño, con un único toque, picase el balón sobre la salida de Leo Román hasta la frontal del área. La pelota voló y acabó en el fondo de la portería.

Hasta ese momento, el partido era una partida de ajedrez. Con el Mallorca presionando alto y con el Celta replegado y estirándose cuando tenía el balón. De hecho, los vigueses estuvieron certeros y aseados en la circulación de la pelota, uno de los debes de la primera contienda. Fruto de esa clarividencia, en una de sus llegadas, Ilaix Moriba se sacó un zambombazo desde la frontal que puso a prueba a Leo Román.

Andrei Radu también estuvo seguro en la otra portería en los centros laterales y en un disparo de Mateo Joseph. El problema del Celta es que el Mallorca metía con facilidad balones a la espalda con los que sufría la renovada línea de centrales, con Manu Fernández, Carlos Domínguez y Marcos Alonso. Entre Mateo Joseph y Asano le estaban complicando la vida al Celta y el nipón tuvo una buena ocasión con un tiro demasiado cruzado.

El Celta se fue al descanso con ventaja en el marcador, pero pudo haber marcado el segundo en el último instante con un control delicioso de Iago Aspas, que lanzó el contragolpe, pero Ferran Jutglà no encontró el pase para un Pablo Durán completamente solo. El de Tomiño ocupó la posición de nueve y el catalán partió desde la izquierda en el frente de ataque.

Con el marcador a favor, el Celta fue capaz de defenderse con el balón durante gran parte de la segunda mitad, creando un par de llegadas muy claras para matar un partido ante un rival que cambió de sistema y que intentaba vivir en campo contrario, pero sin gobernar de verdad el partido. Pablo Durán tuvo una contra con ventaja que no acertó a matar ante Leo Román y Williot Swedberg, nada más salir, tiró alto. Quien lo tenía todo a favor era Beltrán, en una contra de libro en la que partió con ventaja, pero cuando estaba solo dentro del área, se frenó, se dio la vuelta y su tiro salió demasiado cruzado.

En la jugada siguiente, la defensa del Celta hizo aguas de un modo colectivo. Permitió el ataque del conjunto balear, Domènech evitó que se perdiera por la línea de fondo y los vigueses no sacaron un balón que le cayó muerto a Mateu, que estaba solo dentro del área y tuvo tiempo para armar un disparo colocado y empatar.

Quedaban cinco minutos y otros tantos de alargue, y lo mejor que le pudo pasar al Celta fue salvar un punto, porque los vigueses se encerraron por completo, pero fueron incapaces de salir o parar el partido, sometiéndose a una batería de centros laterales que a punto estuvieron de tirar por tierra todo el trabajo.

Ficha técnica

Malorca - 1: Leo Román; Mateu Jaume, Valjent, Raíllo, Mojica; Mascarell (Dani Rodríguez, min 68), Antonio Sánchez (Kumbulla, min 46), Asano (Marc Domenech, min 68), Pablo Torre (Jan Salas, min 82), Darder; Mateo Joseph (Abdón, min 68).

Celta - 1: Radu; Manu Fernández (Javi Rodríguez, min 64), Carlos Domínguez, Marcos Alonso; Javi Rueda, Sotelo (Beltrán, min 73), Ilaix, Carreira; Aspas (Swedberg, min 64), Jutglà (Borja Iglesias, min 73), Durán (Bryan Zaragoza, min 90).

GOLES: 0-1, min 38: Javi Rueda; 1-1, min 88: Mateu Jaume.

ÁRBITRO: José Luis Guzmán (Comité andaluz). Amonestó con tarjeta amarilla a los jugadores locales Antonio Sánchez, Asano y Mascarell, y a los visitantes Hugo Sotelo y Carlos Domínguez.