




La afluencia a los camposantos fue mayor que el año pasado, al remitir el covid
02 nov 2021 . Actualizado a las 21:48 h.En el día de Todos los Santos, los cementerios de la provincia se llenaron de visitantes que querían recordar a sus seres queridos fallecidos. Una tradición que el año pasado se vio interrumpida (o como mínimo, limitada) en muchos lugares a causa de la pandemia, pero que en este 2021 se ha recuperado con fuerza.
El cementerio lucense de San Froilán lucía ayer especialmente bello. Sobre las lápidas y a los pies de los panteones, un derroche de color brotaba de los centenares de arreglos florales que durante los últimos días han ido depositando familiares y amigos. Cuentan en el camposanto lucense que el trajín de centros comenzó ya la semana pasada y que aunque en el día de Santos la afluencia de visitantes fue constante, todavía se percibió mas trajín el jueves y el viernes de la semana pasada.
Quienes se acercaban hasta San Froilán se encontraban con un ambiente de recogimiento al que los músicos Diego Bermúdez e Iván Martínez añadían, con su repertorio clásico y religioso, un tono todavía más sentido. Una forma de acompañamiento afectuosa y respetuosa a partes iguales.

En otras localidades, este lunes hubo notable afluencia a los cementerios, aunque esa afluencia ya se había notado durante el sábado y el domingo. Así lo comentaron los sacerdotes Óscar Santiago Sanmartín, párroco en Guitiriz, y Antonio Domínguez, miembro de la unidad pastoral de Vilalba. En Guitiriz, además, en la iglesia de Santa María se ofició una misa, muy concurrida; para este martes, a la una de la tarde, está prevista otra en la iglesia de San Xoán; si el tiempo lo permite, luego se rezará una oración en el cementerio parroquial, que está muy cerca de ese templo.
El párroco guitiricense relacionó la presencia de gente en la misa y en el cementerio como señal de vuelta a la normalidad, al haberse rebajado las restricciones impuestas por la pandemia. El citado cura de Vilalba mostró una impresión similar, aunque algunas costumbres no se han recuperado todavía: por ejemplo, no se oficia este martes y, en el cementerio municipal de la capital chairega, la misa que solía tener lugar el día de Difuntos. Durante el fin de semana, según explicaciones de la Policía Local, ya hubo un importante número de visitas a la necrópolis.
También en Meira se recupera la celebración de una misa en el cementerio en la jornada de hoy, y tendrá lugar a las cuatro de la tarde. El sacerdote Miguel Asorey, párroco en este municipio y en otros cercanos, reconoció que la presencia de fieles en los cementerios había sido muy superior al año pasado.