Las intensas lluvias que inundaron Lugo desafían el sistema de alcantarillado

Uxía Carrera Fernández
U. CARRERA LUGO / LA VOZ

LUGO

El torrente de agua que cayó desde Fontiñas al Parque de Paxariños provocó grandes socavones
El torrente de agua que cayó desde Fontiñas al Parque de Paxariños provocó grandes socavones LAURA LEIRAS

La ciudad continuó recuperándose con un operativo especial. Se tomaron medidas de refuerzo en el Anexo y en el HULA

06 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La ciudad de Lugo continuó este lunes recuperándose de la intensa tormenta del domingo con intervenciones de emergencia. Los estragos del agua todavía eran visibles en algunas calles, con tierra o suciedad acumulada; muchos garajes amanecieron abiertos porque los vecinos estuvieron horas sacando el agua y el Concello mantuvo la prealerta con un operativo de específico. 

El concejal Miguel Fernández explicó este lunes que el sistema de saneamiento de la ciudad no fue capaz de absorber el agua en ciertas zonas con una orografía en concreto: «Terreo plano con pouco desnivel». Como es, por ejemplo, la Ronda das Fontiñas. Lugo vivió una borrasca anómala que dejó cifras pocas veces vistas: 30 litros de agua por metro cuadrado en 20 minutos. En el terraplén hacia el Parque dos Paxariños, la gran corriente de agua provocó grandes socavones.

Para paliar sus efectos, el Concello activó un operativo especial con varios camiones absorbentes, nueve operarios, dos capataces y el equipo de Ecolugo. Durante el lunes siguieron en prealerta por posibles lluvias torrenciales. 

Fernández defendió que las inundaciones ocurrieron en zonas puntuales y fue por la cantidad de agua que cayó «non porque non fose correcto o sistema» de saneamiento. Aseguró que las arquetas estaban limpias.

Sin embargo, no fue la primera vez que el agua sobrepasó la capacidad de ciertas calles. El domingo, el PP ya exigía en redes sociales que los sistemas de drenaje funcionasen bien en caso de fuertes lluvias. Si las arquetas estaban limpias y preparadas, lo que deja ver es que puede ser necesaria una ampliación del alcantarillado de la ciudad en algunas zonas para afrontar grandes trombas de agua y evitar colapsos momentáneos.

Por una parte, los materiales utilizados para construir las vías públicas de las ciudades o reformarlas, como el cemento, aumentan la superficie impermeable. Además, desde que se estableció la red de saneamiento y filtración, la población siguió aumentando. 

La posibilidad de que la frecuencia de este tipo de borrascas anómalas para la época del año, provoca que haya que replantear a largo plazo en las ciudades una mejora del alcantarillado.

Los técnicos del HULA analizarán cómo disminuir el riesgo de inundación

El Hospital Universitario Lucus Augusti, el edificio que más seguro debería estar ante las tempestades, suele ser uno de los más afectados por las fuertes lluvias de la ciudad. Este domingo no fue menos y la cuarta planta del hospital acabó repleta de agua, de la que se tuvieron que deshacer los trabajadores como pudieron. 

El hospital lucense cuenta con 120.000 metros construidos con una cubierta de 60.000. «Temos un hospital moi plano, moi horizontal», explicaba este lunes el gerente del área sanitaria de Lugo, A Mariña y Monforte, Ramón Ares. Por tanto, el agua de lluvia se acumula en la cubierta y solo se alivia a través de bajantes, no cae de manera natural como en un tejado.

Este domingo, ya no solo se produjo una gran tromba de agua, sino que también granizó. «O granizo obstruiu os canlóns de recollida de chuvia, as arquetas e as tuberías», aseguró Ares. Por eso, los tubos sobrepasaron su capacidad y empezaron a filtrar agua en la cuarta planta. 

Además, el agua de todas las bajantes se recoge en la planta cero, desde la que van a un colector municipal. Pero la gran cantidad de agua hizo que los tubos de esta planta también se desbordaran, por eso hubo inundaciones en la zona de la entrada, en radioterapia y en la farmacia. También quedó anegado gran parte del aparcamiento. 

Aparcamiento del HULA todavía encharcado este lunes
Aparcamiento del HULA todavía encharcado este lunes

Ramón Ares defiende de todas formas que la construcción del hospital, que se empezó a utilizar hace 14 años, está adaptada «perfectamente» a la meteorología de la provincia. Aun así, aclaró que junto a los servicios técnicos se analizará si hay una solución para intentar reducir el impacto de las grandes trombas. «O risco cero é imposible». 

El director del área sanitaria lucense aseguró que, pese a la «crisis» vivida en el centro sanitario, en ningún momento se tuvo que mudar a ningún paciente ni influyó en la atención asistencial. «Tampouco houbo alteracións nos equipamentos electromédicos nin nas instalacións destas unidades». 

Los sanitarios, el servicio de limpieza, el equipo técnico con el apoyo del de atención primaria se volcaron para limpiar el agua en el menor tiempo posible. Tras trabajar a destajo después de la lluvia, este lunes aseguran que «empezaron el día con normalidad». Aun así, todavía quedaban restos de la tormenta. El aparcamiento seguía encharcado. 

Intervención de emergencia para mejorar las condiciones del Anexo

La actividad del Anexo del Pazo dos Deportes también se vio paralizada porque una cascada de agua de lluvia empezó a traspasar el tejado. Ante las deficiencias de la instalación deportiva, al área de Deportes de la Diputación de Lugo anunció este lunes que realizará una intervención de emergencia para mejorar la capacidad de evacuación del agua de los canalones y de las bajantes. 

«Será unha actuación preventiva coa que se pretende minimizar a entrada de auga ao recinto, en caso de choivas excepcionais como as que ocorreron este domingo», explicaron. Consistirá en reforzar los canalones y habilitar aliviaderos.

La Diputación explicó que el edificio tiene unas características estructurales que hacen que el agua que desborda de los canalones se filtre al interior del recinto. Este lunes tuvieron que suspenderse los entrenamientos previstos de tres equipos.