
Son trayectos circulares homologados que permiten adentrarse en la riqueza natural del interior del cañón del Sil
04 may 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Recorrer la Ribeira Sacra ourensana, por su amplia extensión y el gran número de puntos de interés, puede convertirse en un itinerario de cortas paradas en coche. Sin embargo, conocerla con calma y tiempo permite descubrir a fondo su impresionante riqueza natural. El territorio del cañón del Sil está preparado para adentrarse en él a pie, con rutas circulares homologadas por el Consorcio de Turismo de la Ribeira Sacra. Solo caminando se puede llegar a algunos miradores, menhires o parajes naturales.
HISTORIA

Camiño Real, PR-G 4. Una de las rutas imprescindibles y más sencillas es la del Camiño Real de San Pedro de Rocas. En un itinerario de apenas nueve kilómetros, los caminantes recorren el antiguo trayecto que servía como vía de comunicación con Ourense. Por eso todavía se conservan en numerosos tramos las marcas de los carros sobre el empedrado. Parte desde el núcleo de Esgos y alcanza un desnivel de unos 300 metros. Se adentra en frondosos bosques con grandes formaciones rocosas y pasa por una de la joyas de la Ribeira Sacra, el Monasterio de San Pedro de Rocas.
PATRIMONIO
Ruta granítica, PR-G 253. En Nogueira de Ramuín se encuentra uno de los recorridos mejor preparados, la ruta granítica de Moura. Empieza en la aldea de O Alcouce, un camino circular de unos nueve kilómetros que pasa por un paisaje diferente de la Ribeira Sacra. Se suceden curiosas formaciones graníticas: As Codias, O Penedos de Rufino, O Penedo do Trigo, O Vixiante o Pedra Longa. Las grandes rocas hacen equilibro con el cañón de fondo, ya que al mismo tiempo se puede disfrutar de panorámicas al río. Nada más iniciar la ruta, se pasa por el destacado mirador de A Lampa.
VITICULTURA

Paseo por los bancales, PR-G 224. En los viñedos está gran parte de la esencia de la Ribeira Sacra. La ruta de A Teixeira habilitada por el Consorcio de Turismo permite pasear por los bancales con unas impresionantes vistas al cañón durante unos 14 kilómetros. Saliendo del núcleo urbano del concello, el itinerario avanza rodeado de castaños y carballos hasta llegar a la aldea de Cristosende, rehabilitada en los últimos años, lo que permite conocer la arquitectura local. Primero se desciende hacia el río Mao hasta caminar por una de las laderas del Sil y pasando por el mirador natural donde confluye con el río Edo, A Pena do Corvo. Hay otros puntos de interés como el cruceiro de la aldea de A Cruz, del siglo XVIII.
EL CORAZÓN DEL CAÑÓN

Sendero de Santa Cristina, PR-G 98. La ruta que discurre por el Monasterio de Santa Cristina de Ribas de Sil es una de las más completas, ya que aumenta los kilómetros hasta los 18. Sale desde Parada de Sil y se puede dividir en dos tramos. Gran parte del itinerario se realiza por un camino paralelo al río Sil, con varios miradores como As Fontiñas o los Balcones de Madrid. El recorrido desciende hasta el escondido monasterio en medio de frondosos soutos de castaños. Después afronta una importante subida hasta Parada, con un desnivel de 700 metros.
ETNOGRAFÍA

Orillas del río Mao, PR-G 177. Desde el albergue Fábrica da Luz sale una ruta que persigue al Mao hasta su desembocadura en el Sil. Estos 16 kilómetros permiten conocer diferentes pueblos de montaña como A Miranda y Forcas, acercándose así a la parte más humana de la Ribeira Sacra, sus vecinos. También pasa por puntos como el puente medieval de Conceliñas o la necrópolis de San Vitor.