Pontevedra escala a nivel alto y bate su récord de infecciones covid

cristina barral / juan garcía PONTEVEDRA / LA VOZ

SANXENXO

Sanxenxo, en la imagen el paseo de Silgar
Sanxenxo, en la imagen el paseo de Silgar RAMON LEIRO

Sanxenxo es uno de los cuatro concellos del área sanitaria en restricciones máximas

22 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El comité clínico y Sanidade se tomaron su tiempo para aprobar y anunciar nuevas restricciones ante una evolución epidemiológica covid preocupante desde hace varias semanas, en especial en las Rías Baixas. Con más del 80 % de los nuevos contagios en menores de 40 años y con un ritmo más lento de vacunación este mes, la Xunta frena la desescalada cuando azota la quinta ola. En el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés, la segunda de la comunidad autónoma con más positivos (2.258), serán desde el sábado cuatro los municipios en nivel máximo de restricciones y otros seis en nivel alto.

En máximo estarán Sanxenxo, O Grove, Cambados y Meaño. En estos concellos el ocio nocturno no podrá trabajar, pero no habrá cierre perimetral. En la hostelería, un sector muy castigado en toda la pandemia, ya no se clausuran los locales, que tendrán un 30 % de aforo en el interior y un 50 % en el exterior. Habrá además un control de acceso y se pedirá una prueba negativa de covid en las últimas 72 horas (PCR o test de antígenos), el carné de vacunación o haber pasado la enfermedad.

Otros seis ayuntamientos del área de salud quedarán en nivel alto. Se trata de las dos ciudades, Pontevedra y Vilagarcía, Marín, Poio, A Illa y Vilanova. Vilagarcía, Vilanova y A Illa ya estaban en nivel alto, mientras que Pontevedra, Marín y Poio figuraban en medio. En este nivel alto tampoco habrá ocio nocturno. El aforo en la hostelería será del 50 % tanto en el interior como en el exterior y habrá que acreditar, igual que en nivel máximo, un test negativo, el certificado de vacunación o haber pasado el covid-19.

Además, estarán prohibidas las reuniones de no convivientes entre la 1 y las 6 horas de la madrugada en las localidades de nivel máximo y alto. En el resto de niveles ese veto será entre las 3 y las 6 horas.

En cuanto a Sanxenxo, el titular del Ejecutivo gallego, Alberto Núñez Feijoo, justificó ayer que el municipio turístico se mantuviera hasta ahora en nivel medio a pesar de su elevada incidencia por el «impacto da población flotante» y por su «idiosincrasia específica nestas datas». «Cando toca aplicamos as medidas. Non podemos facer unha excepción nin con Sanxenxo nin con ningún outro concello», dijo Feijoo, que apuntó que con su censo ordinario se hubieran tomado antes decisiones en Sanxenxo.

Reacciones

Tras conocerse las nuevas medidas que implantará Galicia, llegaron las reacciones. El alcalde de Sanxenxo, Telmo Martín (PP), aludió a una subida de contagios explosiva, que los aboca al nivel máximo. «O crecemento dos positivos nos últimos dez días foi explosivo e temos que esforzarnos en reverter esta situación. Fixémolo noutras ocasións e podémolo volver facer. Valoro moi positivamente que se permita un 30 % no interior de hostalería sempre que se acredite que se está libre de covid», dijo el regidor. Sanxenxo tenía ayer 305 casos activos. Nunca se alcanzó una cifra tan elevada.

Pontevedra y Marín también retroceden y subirán a nivel alto. El alcalde de la capital, Miguel Anxo Fernández Lores (BNG), incidió en que la situación de la quinta ola es diferente a las anteriores porque la ocupación hospitalaria y la gravedad de las infecciones es menor. «Creo que habería que cambiar os criterios e aí é onde de algunha maneira meteron un pouco a pata», reflexionó el regidor. Lores ahondó en que, según la información de Sanidade, los contagios se están produciendo en reuniones privadas donde no se mantienen las medidas de prevención. «O que non se pode é seguir botándolle a culpa da pandemia á xente dos mesmos sectores», subrayó el alcalde, que cuestionó el «impás» que hubo la semana anterior y que se utilizó «de forma discriminatoria» en algunos concellos -O Salnés frente a Sanxenxo-.

Por su parte, la regidora de Marín, María Ramallo (PP), insistió en pedir prudencia y en ser estrictos en el uso de la mascarilla y la distancia social, medidas, dijo, que todo el mundo conoce. Hizo hincapié en que la mayor parte de los contagios se están produciendo en celebraciones familiares y de amigos, con mezcla de edades y donde se relajan esas medidas.

Mazazo al ocio nocturno: «No tenemos la culpa, pero nos cierran»

  

La decisión de la Xunta de cerrar el ocio nocturno en los concellos de nivel máximo y alto cayó ayer como un jarro de agua fría en un maltrecho sector que llevaba abierto desde el 1 de julio en el mejor de los casos. Eso en Sanxenxo porque en Pontevedra el 99 % de los locales todavía no habían levantado la verja. Dani Lorenzo, propietario de La Pomada y presidente de Hoempo, lo resume en una frase: «Dicen que no tenemos la culpa, pero nos cierran. Es frustrante. Queremos intentar entender, pero está siendo imposible».

Jorge Alonso, encargado del Dux de Sanxenxo, no se esperaba el cierre del ocio nocturno. «Llevábamos dos días con test de antígenos para entrar y nos cierran. Queremos un margen para trabajar y poder ser seguros», expuso. Ve un agravio comparativo con el resto de la hostelería, que sí puede abrir con medidas: «Es un varapalo. Llevamos 20 días abiertos. Somos 32 personas y nos mandan para casa».