De niño montaba circuitos y ahora asesora proyectos aeroespaciales

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El ingeniero de telecomunicaciones mariñano Luis Miranda Acebedo fundó y dirige con dos socios en Vigo SC Robotics, una empresa tecnológica puntera que crea dispositivos que generan datos que se pueden utilizar en inteligencia artificial (IA)

27 mar 2023 . Actualizado a las 13:04 h.

Desde bien pequeño, Luis Miranda Acebedo destacó por ser un niño muy tranquilo y buen estudiante. Tocaba la gaita en el grupo folklórico del CIT de A Pontenova y le gustaba la pesca, pero ya entonces tenía como afición montar circuitos eléctricos y motores. Una inquietud infantil que, bien trabajada y con el paso del tiempo, le ha permitido asesorar incluso proyectos aeroespaciales. «A electrónica chifrábame desde pequeniño, sempre pedía de regalo ese tipo de xoguetes», relata este ingeniero de telecomunicaciones que nació en el municipio mariñano de A Pontenova en el año 1981 y que actualmente desarrolla su carrera en Vigo. En la ciudad olívica fundó y dirige con dos socios (Daniel Pérez, natural de Leiro, en Ourense; y Xabier Crespo, originario de A Guarda, en Pontevedra) SC Robotics. Se trata de una empresa tecnológica puntera que crea dispositivos que generan datos que se pueden utilizar en inteligencia artificial (IA): una disciplina que intenta replicar procesos similares a la inteligencia humana, y que cada vez está más en auge.

En el 2022, la compañía alcanzó los 330.000 euros de facturación. «Nuestra experiencia al servicio de tus ideas, desde la validación del prototipo hasta la fabricación», dice el lema de una empresa cuyo equipo trabaja en áreas de conocimiento muy diversas, y que, entre otros, contribuye a mejorar y convertir en óptimo el proceso de digitalización en la industria 4.0. Es el caso, por ejemplo, de los teclados sin contacto diseñados para combatir el coronavirus.

Asesoramiento a Invernaderos de Huelva

El resultado final de uno de los proyectos más recientes de la empresa de Miranda, Pérez y Crespo es visible esta temporada en las estanterías y mostradores de las fruterías gallegas. En ellas se comercializan toneladas de fresas que crecen en algunos de los invernaderos de Huelva que asesora IG4 Agronomía, una empresa especializada en agricultura de precisión. La empresa gallega le ayuda a cuidar los cultivos por medio de «un cacharro» que monitoriza parámetros como la humedad o la temperatura de la tierra con el objetivo de decidir cuál es el momento óptimo para regar las plantas.

Otro de los trabajos más sobresalientes de SC Robotics está relacionado con la Libre Space Foundation, amparada por la Agencia Espacial Europea y cuya base está en Grecia. La misión de la empresa gallega en este caso es colaborar en un proyecto aeroespacial de seguimiento óptico de satélites. Otros nichos en los que la compañía desarrolla iniciativas empresariales están vinculados a sectores como el de la industria y el de la cartelería digital. Además, según expone Miranda, el grupo no ha dejado de lado la «investigación pura» para mejorar sus propios productos o explorar nuevas ideas y mercados. Y en la actualidad desarrolla un proyecto de I+D+i para el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de la mano de una fundación con sede en Cataluña.

Un innovador proyecto con el sector vitivinícola

SC Robotics tiene un contacto muy estrecho con A Mariña, la comarca natal de uno de sus socios, por lo que la empresa colabora con firmas como la ribadense Nigal, que impulsa un proyecto innovador para la firma vinícola Viña Costeira. La iniciativa recibe el nombre de «Libatio» y en ella toma parte también otra empresa viguesa con vínculos en el norte de Galicia, Indominus. «O que fixemos nós neste caso foi crear un dispositivo electrónico a medida, especializado en monitorización remota, que se coloca na tapa da cuba onde se garda o viño, e que mide a temperatura, a humidade, a presión, a concentración de osíxeno...», cuenta Luis Miranda. Además, el dispositivo ofrece la posibilidad de captar imágenes del interior de la cuba. «Saca fotos para ver se, por exemplo, medran bacterias», subraya el profesional pontenovés.

Esos sensores ayudan a los especialistas en enología a controlar el nivel de fermentación del vino sin necesidad de abrir las barricas: una operación que antaño era imprescindible para controlar el grado de maduración de los caldos, pero que acostumbraba a implicar la entrada de oxígeno, con el consiguiente aumento del riesgo de que el vino «se pique» y se acabe estropeando. En resumen, mientras SC Robotics pone en marcha los dispositivos que generan los datos, Nigal se ocupa de controlar y analizar los citados datos que ofrecen los sensores para enviárselos de manera periódica a Viña Costeira.

Otro de los proyectos de SC Robotics ha sido la creación de un contador de peregrinos basado en Inteligencia Artificial. «Hemos trabajado en un proyecto para utilizar visión por computador e IA para contar cuántas personas cruzan cualquiera de las subrutas individuales, recopilando información estadística con dos objetivos principales: dar más información a los gobiernos locales para que puedan tomar decisiones para mejorar la experiencia de los peregrinos en base a datos más precisos. Y destacar el valor de este tipo de turismo y su impacto potencial para las economías locales».

Nuevos desarrollos

Los tres ingenieros impulsores de esta empresa están muy vinculados también a A Industriosa, una asociación sin ánimo de lucro con sede en Vigo que gestiona y promueve un medialab para ayudar a desarrollar proyectos a empresas, makers y comunidades tecnológicas. Luis Miranda fue su presidente hasta hace unas semanas. Un emprendedor que, tras cursar la antigua EGB en el colegio público de A Pontenova y estudiar en el IES Enrique Muruais, decidió desplazarse a Lugo para completar el Bachillerato Tecnológico en el Instituto Politécnico. Una apuesta que en el último trecho de la década de los noventa era muy novedosa y parecía arriesgada, pero que el tiempo ha confirmado como perfecta.