El BNG tendrá la alcaldía de Arzúa todo el mandato y las principales concejalías

Natalia Rodríguez Noguerol
n. noguerol ARZÚA / LA VOZ

ARZÚA

Sandra Alonso

Formará tripartito con las dos fuerzas que en el pasado mandato gobernaron en coalición, Alternativa por Arzúa y el PSdeG

05 jul 2023 . Actualizado a las 05:05 h.

El BNG asumirá, los próximos cuatro años, la alcaldía de Arzúa, así como las principales áreas del gestión en el tripartito que formará con los dos partidos que, el pasado mandato, gobernaron en coalición: Alternativa por Arzúa y el PSdeG. Las tres formaciones llegaron a un acuerdo que, además de la permanencia en la alcaldía, otorga a los nacionalistas, con dos ediles a mayores que el regidor, las competencias de Urbanismo, Obras y Servicios, Medio Ambiente y Bienestar Animal, Deportes, Igualdad, Juventud e Infancia, Normalización Lingüística y Patrimonio, Participación Vecinal y Transparencia, Personal y Régimen Interno, y Hacienda y Contratación. En el reparto, Alternativa por Arzúa, con tres ediles como el Bloque, se queda con las concejalías de Cultura y Educación, Servicios Sociales y Tercera Edad, y Atención a las parroquias. Y el PSdeG, con una munícipe, asumirá Turismo, Promoción Económica, Comercio y Consumo, y Acción Urbana. Además, los independientes tendrán la primera tenencia de alcaldía, y la representante socialista, la segunda.

La distribución de áreas fue lo único que trascendió del acuerdo de gobierno de Arzúa, que se desconoce si hará uso de la plaza que le corresponde de personal de confianza. Mantener el que tuvo durante sus doce años como alcalde —el mismo que el propio BNG en los ocho años precedentes— fue la única línea roja que José Luis García puso para apoyar la investidura de Xoán Xesús Carril. La negativa del Bloque a aceptar una condición que el ex-regidor defendió como innegociable lo había motivado a postularse como candidato a la alcaldía, y a favorecer el acceso al cargo de Rafael Ribadulla, del PP, que es, con seis ediles, la lista más votada. Sin embargo, en un giro inesperado de última hora, respaldó, junto con el PSdeG, la toma de posesión del alcalde nacionalista.