De cura a viticultor en O Ribeiro con un tinto de premio que lleva el nombre de sus dos hijas

R. N. P. OURENSE

AGRICULTURA

Jonatán, con su mujer, y las dos niñas que dan nombre al vino premiado en Vinis Terrae
Jonatán, con su mujer, y las dos niñas que dan nombre al vino premiado en Vinis Terrae Santi M. Amil

Vinis Terrae cerró su última edición con la entrega de los premios de la cata profesional. El exsacerdote, Jonatán Pousada se llevó el galardón en la categoría de tintos

04 jun 2025 . Actualizado a las 17:10 h.

El salón Vinis Terrae cerró ayer en Expourense las puertas de su edición número once tras haber ofrecido una oportunidad de citas de negocio con inversores extranjeros a medio centenar de grandes y pequeñas bodegas. Hubo más de ochocientas reuniones y la visita de un millar de profesionales de la restauración, hostelería o distribución al recinto ferial ourensano. El broche de oro a la jornada llegó con la cuarta edición de la cata extraordinaria. En las tres categorías hubo pleno ourensano entre los premiados. En la competición de tintos el galardón principal fue para El tinto de Candela y Valentina (2024), de Casal do Canteiro (D. O. Ribeiro). En la de blancos el primer puesto fue para 988 Godello (2024), de Adega Vellas Xeracións (Ribeira Sacra), mientras que en la categoría de otras añadas los vencedores fueron los caldos Viladequinta (2020), de Adega O Cabalín (D. O. Valdeorras).

Casal do Canteiro

El primer premio en vinos tintos se quedó en O Ribeiro. Casal do Canteiro es el proyecto vital de Jonatán Pousada un viticultor que se embarcó en la iniciativa de la bodega tras dejar la Iglesia. Fue cura durante una década y tras un breve paso por el sector de la automoción abrió una bodega, que ahora ve reconocida su labor con el primer premio de la cata de Vinis Terrae. Es la primera añada y para él es muy especial, ya que lleva en la etiqueta impresos los nombres de sus dos hijas. Se denomina El tinto de Candela y Valentina. «La vida es caprichosa y quiso que Candela y Valentina nacieran el mismo día que su bisabuelo O Canteiro, pero 105 años después. Y si el año pasado homenajeábamos el origen, con Casal do Canteiro, este año celebramos la vida con un vino que brota, a la par, desde lo más profundo de nuestra ilusión, nuestro trabajo y nuestro ser», señala Jonatán.

Emocionado con la distinción, puso en valor el hecho de que su proyecto con poco más de un año y medio de vida se impusiera a bodegas de gran renombre: «Como anécdota, el año pasado hicimos un tinto y tanto a mí como al enólogo no nos gustó y lo descartamos. Ahora, parece que acertamos», explica. A la hora de definir su caldo premiado, Jonatán Pousada indicó: «Es un vino apto para todos los públicos, tanto para gente que esté ya iniciada como para la que está empezando. También se adapta a platos de carne y pescado, porque es una propuesta ac para todos los paladares y muy golosa».

Teresa López, de Adega O Cabalín
Teresa López, de Adega O Cabalín Santi M. Amil

Adega O Cabalín

En la categoría otras añadas, el primer premio se fue hasta la D. O. Valdeorras. En concreto, la propuesta galardonada fue Viladequinta (2020), de Adega O Cabalín, un hermoso paraje de la comarca de Valdeorras que se encuentra en una ladera muy inclinada, situada en un valle a una altitud de entre 560 a 600 metros. Es un proyecto de viticultora que responde al trabajo de Teresa López y Luis Peique que están detrás del tinto ahora premiado. Sus creaciones suelen tener gran acogida en la afamada guía de Robert Parker.

Juan Vázquez, de Casa Moreiras en la Ribeira Sacra, que está considerada la bodega más antigua de Galicia
Juan Vázquez, de Casa Moreiras en la Ribeira Sacra, que está considerada la bodega más antigua de Galicia Santi M. Amil

La más antigua de Galicia

Entre los participantes en la cata de Vinis Terrae estaba la que está considerada como la bodega más antigua de Galicia. Casa Moreiras, de la parte lucense de la Denominación de Origen Ribeira Sacra. Con Juan Vázquez al frente destacó en la categoría de tintos, donde alcanzó el tercer puesto de la prueba. Se trata de una bodega semienterrada, con arquitectura singular, con una inscripción original de la época que se conserva en el interior de la bodega desde el año 1692, con vistas al valle de Pantón.