Ana Pontón: «É un disparate a xeolocalización e o diario electrónico na baixura galega»
SOMOS MAR
«Faría inviable a súa actividade», advierte la portavoz del BNG en un encuentro con la pesca de A Mariña
09 abr 2021 . Actualizado a las 18:41 h.«É un disparate e un sen sentido e imos defender en Bruxelas e no Parlamento que se exclúa a frota de baixura porque este regulamente faría inviable a súa actividade e mesmo suporía un risco», sostuvo este viernes Ana Pontón, portavoz del BNG, durante un encuentro con dirigentes de organizaciones de armadores de Celeiro y Burela y de cofradías de A Mariña. Se refiere al Reglamento de Control Pesquero aprobado por el Parlamento Europeo, que según los nacionalistas obligaría a «instalar cámaras a bordo, a xeolocalización permanente ou facer obrigatorio o diario electrónico de pesca para embarcacións a partir dos catro metros».
Pontón encabezó un «cumio pesqueiro» celebrado en Burela, en el que participaron otros dirigentes del Bloque, como Ana Miranda, portavoz en Bruselas; Rosana Pérez, portavoz parlamentaria de Pesca en Galicia; los diputados lucenses Daniel Castro y Carme Aira, además de responsables de la formación en A Mariña, como Ana Ermida. Rechazan aplicar las medidas promovidas por la UE «porque a frota galega é maioritariamente artesanal e de baixura e pesca nas rías en mareas de menos de 24 horas». Para la líder del BNG, el Reglamento de Control Pesquero «demostra até que punto se lexisla na Unión Europea ignorando a realidade da frota galega».
El impacto del «brexit»
Durante el encuentro también analizaron «o impacto do brexit, tendo en conta que Galiza dispón do 70% da cota española en augas británicas e, no caso da Mariña, dos 88 barcos que faenan no Gran Sol, máis da metade teñen base nos portos de Burela e Celeiro». De ahí que Pontón, apelando «a esta realidade», abogue porque se resarza a esa flota con «compensación directas por perdas a través do Fondo Europeo Marítimo e de Pesca». Secunda también una demanda ya planteada por el presidente de la Xunta y por la Consellería do Mar, en el sentido de que el Gobierno gallego «reclame participar directamente nas negociacións co Reino Unido, como fai por exemplo, Escocia». Argumenta que los pesqueros gallegos «xóganse moito nas cotas de capturas de especies moi valiosas desde o punto de vista comercial, como a pescada ou rapante».
El marrajo inmovilizado
Ni los dirigentes pesqueros de A Mariña ni los del BNG olvidaron el problema de los palangreros de superficie que desde julio del año pasado tienen retenidas en cámaras congeladoras 90 toneladas de marrajo dientuso. Son parte de las que podían capturar en el Atlántico Norte, de acuerdo con las cuotas establecidas por la Unión Europea y por el Ministerio de Pesca, pero el Ministerio de Transición Ecológica les prohíbe comercializarlas, con las consiguientes pérdidas y gastos añadidos para los armadores afectados. Coincide el BNG con la Xunta y con el comisario europeo de Pesca en que impedir vender pescado ya capturado legalmente solo perjudica a los marineros y no beneficia para nada ni al recurso ni al medio ambiente marino. A mayores, los nacionalistas solicitan que, «de cara ao futuro, ambos ministerios se coordinen e non prexudiquen ao sector».
«Prioritarios» en las vacunas
Igual que el conjunto del sector pesquero, sindicatos y organizaciones empresariales, el Bloque también demanda que los tripulantes de la flota «sexan considerados colectivo prioritario a efectos de vacinación anticovid». Esa reivindicación, añade el comunicado difundido por esa formación, la defenderá en el Parlamento gallego. Como ejemplo de las consecuencias de contagios entre marineros embarcados, recuerda que en A Mariña se «rexistraron varios casos de barcos afectados polo virus, que tiveron que gardar corentena, con todo o que iso implica de perda de actividade e de ingresos para os traballadores» y los empresarios.
El puerto comercial de San Cibrao
No olvidó la delegación nacionalista encabezada por Pontón una reclamación que han repetido durante los últimos veintisiete años: la creación de una autoridad portuaria para el puerto comercial de San Cibrao, gestionado por la Autoridad Portuaria de Ferrol y explotado en exclusiva por Alcoa, así como la apertura del dique norte al tráfico general. Para el BNG, «non é razoable que sexa Lugo a única provincia marítima sen autoridade portuaria» y que el grueso de los beneficios que generan esos muelles no reviertan en A Mariña. De ahí que haya lanzado una nueva batería de iniciativas políticas, en el enésimo intento de que se haga realidad una histórica demanda de los agentes sociales mariñanos y lucenses. Pese a los apoyos unánimes de todos los partidos, ninguno lo hizo realidad cuando gobernaron España.