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La nueva propietaria de la mina de San Finx tendrá que aclarar a la Xunta el proyecto a emprender

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

SOMOS MAR

CONCHI PAZ

Los conselleiros de Economía, Mar e Infraestruturas evaluaron la situación con responsables locales de los ayuntamientos de Porto do Son, Outes, Lousame, Noia, Ribeira y Muros

12 ene 2022 . Actualizado a las 20:11 h.

La Administración autonómica se mantiene vigilante para garantizar que cualquier actividad minera que se desarrolle en Galicia cumpla con las garantías urbanísticas, ambientales y técnicas exigidas por la legislación vigente y que sean compatibles con un modelo de actividad sostenible y respetuoso. En este aspecto insistió ayer el vicepresidente económico y conselleiro de Economía, Empresa e Innovación, Francisco Conde, durante la reunión mantenida para abordar la inquietud surgida ante un posible reinició de los trabajos de extracción en el yacimiento de San Finx.

Francisco Conde, acompañado de las conselleiras de Mar, Rosa Quintana, e Infraestructuras, Ethel Vázquez, evaluó la situación de la mina lousamiana en el transcurso de un encuentro con responsables locales de los ayuntamientos de Porto do Son, Noia, Outes, Muros, Lousame y Ribeira. El vicepresidente económico explicó que la Xunta no ha recibido ninguna solicitud formal sobre la transmisión de la titularidad del yacimiento.

Asimismo, precisó que tampoco ha llegado ningún tipo de comunicación a este respecto por parte de la compañía Sacyr —propietaria de la mina hasta principios de año— ni de Rafaella Resources —el grupo australiano que ha adquirido la instalación—. Sobre este particular, Conde subrayó que será preciso comprobar la solvencia técnica y financiera de la nueva empresa.

Proyecto actualizado

El vicepresidente económico indicó a los asistentes al encuentro que, en todo caso, la compañía que se ha hecho cargo de la mina debe aclarar el proyecto que pretende llevar a cabo.

En este sentido, precisó que en el caso de pretender actuar en las galerías que ahora están inutilizadas por la presencia de agua deberá presentar un plan de explotación actualizado, que tendrá que someterse a la evaluación ambiental que corresponda.

El representante autonómico recalcó que la concesión de Lousame continúa vigente, siempre y cuando se cumpla con todas las condiciones técnicas, urbanísticas y ambientales establecidas.

La reanudación de la actividad minera genera una gran inquietud entre los colectivos marineros, temerosos de que el vertido de aguas pueda tener alguna afección sobre los bancos marisqueros de la ría de Muros-Noia. También los dirigentes locales están alerta.

La autorización de una depuradora está en fase de tramitación

La reunión sirvió para que se dieran a conocer los últimos pasos dados. Así, el vicepresidente económico subrayó que se ha iniciado la tramitación para autorizar una nueva instalación depuradora que garantice que los vertidos de agua de la mina se efectúen cumpliendo con las directrices y parámetros de calidad establecidos por Augas de Galicia, basándose en los resultados obtenidos en los ensayos realizados en la prueba piloto. Recalcó que todo ello evitando que se produzca cualquier afección a la ría de Muros-Noia.

Además, durante la reunión con los responsables locales se les confirmó que desde la Xunta de Galicia se continuará exigiendo a la empresa la restauración de las balsas.

La Administración gallega indicó que trabaja con la mayor planificación y anticipación con el objetivo de velar para que la empresa actúe con responsabilidad y de forma que se den las condiciones necesarias para garantizar la calidad de las aguas y la compatibilidad con las actividades que se desarrollan en la zona.

La nueva propietaria, Rafaella Resources, también explota la mina de wolframio de Santa Comba y su objetivo es afianzar su posición.