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La ciencia, a un paso de descubrir por qué el rodaballo se convierte en pez plano

e. abuín REDACCIÓN / LA VOZ

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CSIC | EUROPAPRESS

Investigadores del CSIC logran descifrar por primera vez cómo se organiza el ADN de la especie y plasmarlo en un mapa tridimensional

30 may 2023 . Actualizado a las 04:46 h.

Después de cinco años de investigación, científicos del CSIC, aliados con los expertos del Pescanova Biomarine Centre, han logrado descifrar, por primera vez, cómo se organiza el ADN del rodaballo para que esta especie que nace con forma convencional se convierta en pez plano. Y lo principal: han conseguido plasmarlo en un mapa tridimensional para no perderse en ese proceso de modificación del genoma que sufre el Scophthalmus maximus. Es, dice Josep Rotllant, del laboratorio de Biotecnología Acuática (AcuaBioTec Lab) del Instituto de Investigaciones Marinas de Vigo (IIM), un paso importante para desentrañar por fin por qué el rodaballo pasa de ser una larva pelágica simétrica a un juvenil bentónico asimétrico y completamente plano. Ahora lo que queda es «encontrar las zonas del mapa que están involucradas en el cambio de forma», apunta. Pero de lo que no hay duda es que esta herramienta permitirá a la comunidad científica estudiar en profundidad las bases moleculares de este proceso y ayudar a comprender la cuestión fundamental de cómo un único genoma puede crear dos diseños corporales completamente diferentes en un mismo animal.

Rotllant explica que no solo abre las puertas para descubrir las claves de esa mutación, también para el lenguado o, incluso, cómo pasa una oruga a ser mariposa. En cuanto a las aplicaciones prácticas, el responsable de la investigación por parte del IIM señala que entender ese proceso permitirá resolver problemas que ahora se dan en el cultivo, como la despigmentación o las malformaciones, así como adelantar o acortar el tiempo de crecimiento. «Permitirá que crezcan más rápido y correctamente sin que eso requiera más alimentación, por lo que se minimizarán los costes y el impacto en el medio», explica el investigador. El equipo de Rotllant y el del Centro Andaluz de Biología del Desarrollo (CABD-CSIC) que han llevado a cabo el estudio se muestran satisfechos de haber facilitado esta herramienta a la comunidad científica. «Ha sido una experiencia estupenda poder contribuir para este trabajo con apoyo técnico para la realización de algunos análisis», señala Juan Tena, del CABD-CSIC.

Los detalles se han publicado en Scientific Data.