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Las simulaciones apuntan a que los pélets esquivarán Galicia y derivarán hacia el Cantábrico

Somos Mar REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS MAR

BASILIO BELLO

El tiempo complica la actuación de los voluntarios en las playas y de los medios por mar y aire

14 ene 2024 . Actualizado a las 14:19 h.

Tal y como habían predicho los meteorólogos, hace un día de perros. Más para bajar a una playa en busca de esas diminutas bolas de plástico que desde el día 13 de diciembre han ido llegando en sucesivas oleadas a las playas. Aún así, voluntarios, voluntariosos y brigadas de la Xunta se acercaron a los arenales a retirar la mayor cantidad de plástico —así, en general—. La Xunta desplegó un dispositivo integrado por menor número de efectivos que ayer —hoy son 300 personas, dos helicópteros, cuatro buques de gran porte y cuatro embarcaciones más pequeñas—, mientras que el Gobierno contribuyó con un helicóptero, el Helimer 401, que sobrevoló, sin éxito, la zona en la que este sábado la aeronave de Gardacostas, el Pesca 2, avistó y recuperó un saco de pélets cerrado y flotando. Los medios autonómicos localizaron a última hora del día otro flotando entre las rocas de Laxe que no pudieron recuperar porque estaba anocheciendo, según explicó en la Radio Galega la vicepresidenta de la Xunta, Ánxeles Vázquez, portavoz del Ejecutivo autonómico en esta crisis.

Pero ese día de perros que tanto está dificultando las tareas en tierra está propiciando que la marea de pélets esquive las costas gallegas y se vayan hacia el Cantábrico, poniendo en alerta así a las otras comunidades autónomas, principalmente Asturias y Cantabria. Eso era lo que habían avanzado el viernes los expertos de Meteogalicia: que los vientos y las corrientes eran propicias para la arribada de esos pélets que el día 8 de diciembre perdió el Toconao frente a Viana do Castelo, pero que, dependiendo de la fuerza e intensidad de las mismas, era posible que superasen la costa de Galicia. Y, por el momento, las previsiones se van cumpliendo.

Vázquez explicó que la costa de las Rías Baixas es la más afectada y que la menor incidencia se da en la zona de A Mariña, pero con el cambio de tendencia podrían comenzar a recibir más bolitas de plástico.

Hasta el momento, se ha recuperado de las playas el equivalente a 90 sacos de pélets, de 25 kilos, según explicó la Consellería de Medio Ambiente en un comunicado.