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Hallados cinco de los seis desaparecidos en el yate de lujo Bayesian, que se hundió en segundos en Sicilia

Somos Mar REDACCIÓN / LA VOZ, AGENCIAS

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Reuters

Se han recuperado cuatro cuerpos. Fiscales italianos han interrogado hoy al capitán. El rescate de los 15 supervivientes «fue traumático», cuenta el capitán del barco que los auxilió

21 ago 2024 . Actualizado a las 21:18 h.

Los equipos de emergencia italianos hallaron este miércoles a cinco de los seis desaparecidos en el interior de yate de lujo Bayesian, que se fue a pique el lunes de madrugada cuando estaba fondeado frente a Porticello, en Palermo, Sicilia. Se han recuperado cuatro cuerpos y la búsqueda se suspende hasta el jueves, según el diario británico The Guardian. Aún no han sido identificados, pero entre las víctimas del naufragio estarían el «Bill Gates» británico, Mike Lynch y su hija Hannah, el directivo del banco Morgan Stanley International, Jonathan Bloomer, y su esposa Judy, y el abogado de Lynch, Chris Morvillo, con su esposa Neda, apuntó Efe citando informaciones del jefe de Protección Civil regional, Salvo Cocina.

La Fiscalía de Termini Imerese ha interrogado hoy al capitán, como parte de la investigación abierta para intentar esclarecer por qué un buque de 56 metros de eslora se hundió en menos de un minuto cuando estaba fondeado cerca de la costa.

Contaba con el mástil de aluminio más largo del mundo, de 75 metros. Un vídeo recoge los últimos segundos del velero a flote. Con su espectacular palo mayor iluminado, desaparece en medio de la tormenta. Sucedió el lunes, alrededor de las cinco de la madrugada, hora local. Otro barco cercano no sufrió daños, a pesar de que también fue azotado por el fuerte tornado.

Tras lograr acceder el martes al puente de mando del superyate, los submarinistas entraron en el casco este miércoles, pero con mucha dificultad debido a los muebles y otros objetos que impiden el paso. El responsable de las operaciones de los buzos, Marco Tilotta, explicó que, como el pecio yace a 49 metros de profundidad, el margen de maniobra de los equipos de buzos es de 12 minutos por inmersión. De ahí que como apoyo se recurriese a un robot submarino, capaz de operar a una profundidad de hasta 300 metros, durante 6 o 7 horas seguidas.

También este miércoles ha declarado ante los fiscales de Termini Imerese, James Catfield, capitán del Bayesian, de nacionalidad neozelandesa y uno de los 15 supervivientes. El interrogatorio de más de horas ha sido en un complejo hotelero cerca de la localidad de Porticello, apunta Efe. Los investigadores intentan esclarecer si el naufragio fue causado por una tromba marina o por el llamado downburst, una ráfaga de viento muy fuerte que se desplaza horizontalmente a una velocidad que puede superar los 100 kilómetros por hora, informa Efe.

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También pretenden verificar si el hundimiento se debió a la posible rotura del mástil, capaz de soportar 3.000 metros cuadrados de velas y construido para resistir condiciones climáticas adversas. Sin embargo, añade Efe, una fuente informada de las investigaciones dijo al diario Corriere della Sera que, según lo encontrado en las inmersiones realizadas por los rescatistas el martes, el mástil parece intacto y otra hipótesis, cuya probabilidad queda por ver, sería que chocase contra un banco de arena.

En el siniestro lograron salvarse 15 de las 22 personas que estaban a bordo, 12 turistas y 10 tripulantes. El lunes se había recuperado el primer cadáver, el cocinero del Bayesian, Ricardo Tomas

El rescate de los 15 supervivientes «fue traumático», cuenta el capitán del barco que los auxilió

El capitán Karst Börner, cuyo barco estaba anclado cerca cuando se fue a pique el Bayesian, reconoció este miércoles que el rescate «fue traumático». «En un momento así, no piensas, simplemente haces lo que tienes que hacer», declaró al canal regional neerlandés Omrop Fryslán, testimonio del que se hace eco Efe. Su embarcación fue la que brindó los primeros auxilios a los 15 supervivientes.

«El pronóstico del tiempo incluía tormentas eléctricas y eso puede ser extraño en el Mediterráneo», explicó Börner, quien el lunes madrugó, junto a su tripulación, «algo preparados» por la previsión meteorológica. Y se cumplió cuando se desató una tromba marina «fuerte e intensa». «Tuvimos dificultades para mantener el barco en su lugar con el motor y el ancla. El yate estaba detrás de nosotros. De vez en cuando mirábamos para ver dónde estaba. De repente, desapareció», relató.

Inmediatamente después, revisó el radar y no vio señales del velero, pero divisó una bengala roja, por lo que subió con sus compañeros al bote auxiliar y se dirigieron al lugar del incidente. «Encontramos una balsa salvavidas con 15 personas, cuatro gravemente heridas y un bebé», recuerda. Los llevaron a todos a su barco y los abrigaron, y lo comunicaron a la Guardia Costera, agrega Efe.