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La paralización de los trabajos de las fragatas F-110 vuelve a planear en Ferrol

Beatriz García Couce
Beatriz Couce REDACCIÓN

SOMOS MAR

Imagen de archivo de una asamblea de la plantilla de Navantia
Imagen de archivo de una asamblea de la plantilla de Navantia Cedida

La plantilla de Navantia votará en urna una medida de presión en la negociación del convenio colectivo que afectó en verano a trabajadores auxiliares

20 nov 2024 . Actualizado a las 10:36 h.

La asamblea celebrada en la mañana de este lunes en el garaje de Navantia Ferrol experimentó un giro de guion no previsto. La plantilla estaba convocada para decidir si aceptaba cambiar la movilización prevista para el próximo jueves en Madrid, ante la sede del Ministerio de Hacienda -de quien depende la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), accionista único de Navantia- por un paro de 24 horas en el astillero. Se trata de protestas que se enmarcan en la negociación del convenio colectivo. que se remonta a hace dos años sin que se haya llegado aún a un acuerdo. 

El debate acerca de la marcha de las conversaciones llevó a la CGT a plantear que se votase de nuevo el bloqueo de los trabajos de aceros en la antigua Bazán, para frenar el desarrollo de la construcción de las fragatas F-110 y presionar a la dirección, único contrato en marcha en las instalaciones. Esta medida, que ya se aplicó durante varios meses en la factoría, impactó de lleno durante el verano en las compañías auxiliares que acometen ese tipo de trabajos y llevó, en algunos casos, a la destrucción de empleo y a la presentación de ajustes laborales.

Inicialmente, se produjo una votación a mano alzada sobre este asunto, aunque posteriormente se decidió repetirla el próximo miércoles en urna.

 Lo que sí aprobaron los trabajadores fue la permuta de la manifestación en Madrid -a la que se habían comprometido a ir unas 150 personas- por el paro en Ferrol. Será de ocho horas por turno, y comenzará a las diez de la noche del día 20.