El alquiler del bar y una subvención darán liquidez a la maltrecha cofradía de Cambados
SOMOS MAR

La plantilla sigue a la espera de cobrar la mitad de la nómina de mayo. Los gastos fijos de la entidad superan los 60.000 euros al mes
14 jun 2025 . Actualizado a las 18:53 h.La situación económica de la cofradía de Cambados es tan precaria que este mes ni siquiera han podido pagar la nómina a la plantilla. El viernes cobraron la mitad del salario correspondiente a mayo y la previsión es que puedan ingresar el resto a lo largo de este mes. Esa es, al menos, la previsión que maneja el patrón mayor, Alejandro Pérez Miser, que este sábado sí habló del asunto. No quería hacer declaraciones hasta que se reuniera con los trabajadores y, sin duda, el comunicado emitido por su antecesor en el cargo, José Manuel Vilas, influyó para que rompiese su silencio, volviendo así a la batalla dialéctica que mantuvieron ambos cuando una moción de censura propició el relevo al frente de la cofradía de San Antonio en el verano de 2023.
Las acusaciones de mala gestión son recíprocas de modo que Vilas responsabiliza a Pérez y viceversa. Lo que no tiene discusión son los números rojos que arrastra la entidad hasta el punto de no poder pagar a sus 26 trabajadores. Los salarios, la amortización de préstamos y el alquiler de los motores de la fábrica de hielo suman 60.000 euros de gastos fijos al mes, a los que hay que sumar los gastos corrientes de luz, agua, telefonía y demás servicios. «Para poder cubrir eses gastos teriamos que facturar un millón de euros ao mes durante todo o ano, e iso é imposible», señala Pérez Miser. El récord de facturación en lonja ronda los ocho millones de euros anuales.
A la vista de estos números cabe preguntarse si la cofradía de San Antonio es viable económicamente, para lo que el patrón mayor no tiene una respuesta rotunda. A corto plazo, explica, se ganará liquidez gracias a una subvención de la Consellería do Mar en concepto de asistencia técnica del 2024 y al alquiler del bar del pósito, que tiene nuevo concesionario y se espera que abra en cuestión de semanas. Entre tanto, la Xunta Xeral tendrá que seguir haciendo «malabarismos» para llegar a fin de mes y seguir aplicando un plan de austeridad, según informa Pérez. Quiere trasladar a la opinión pública que está gestionando una situación heredada por la que pide responsabilidades. «Deberían explicar a onde foron os 280.000 euros do préstamo do ICO que concederon á confraría en agosto de 2021, porque en agosto do 2023 xa se gastaran 265.000», señala en alusión a la anterior Xunta Xeral.
A Vilas le pide explicaciones —«máis ben á banda que está detrás del e lle fai as notas de prensa», apostilla el patrón mayor— y le recrimina que ponga palos en las ruedas de una máquina maltrecha como es la cofradía. Pese a todo, Alejandro Pérez no va a abandonar el barco: «Eu non vin aquí a ganar cartos nin a pedir salarios como fixeron outros», indica, mientras que Vilas lo acusaba el viernes de utilizar dinero de la cofradía para comprar los apoyos que lo auparon hace dos años a la presidencia del pósito.
El «y tú más» se reproduce en otras cuestiones. José Manuel Vilas acusa al cabildo «de non saber tomar decisións correctas» en cuanto a la fábrica de hielo mientras el patrón mayor le reprocha que haya que gastar 3.000 euros al mes por el alquiler de los motores de unas instalaciones que dan déficit; y si Vilas habla de dejadez a la hora defender los intereses de la cofradía ante los tribunales, Pérez Miser lo culpa de la factura que está teniendo que pagar la entidad por demandas interpuestas por los trabajadores a raíz de decisiones adoptadas en anteriores mandatos. Hablaba Vilas en su comunicado, también, de la «errática xestión e vacío de poder» en el marisqueo a pie mientras que el patrón mayor considera que esta agrupación es un ejemplo en Galicia y motivo de «orgullo».
Pese a los problemas económicos, la cofradía tiene entre manos un importante proyecto, la reforma de la lonja de Tragove, una obra que supera el millón de euros y financia Portos de Galicia. Entre otras actuaciones hay que cambiar el tejado, lo cual obliga a trasladar las subastas a la planta de eviscerado de la vieira, y, aunque en principio se habló de hacerlo este mismo mes, cofradía y Portos han optado por esperar a agosto. Las artes menores trabajan en julio y eso propicia un aumento de la actividad en la lonja.