«Es una buena pieza que estamos repartiendo entre los clientes de hoy», cuenta Enrique Carneiro, padre del dueño de este templo del buen comer
21 jul 2025 . Actualizado a las 18:30 h.«De la mar, el mero; de la tierra, el cordero». Los refranes son una fuente de sabiduría, en especial los que tienen que ver con la gastronomía. Que este pescado blanco es unos de los manjares más preciados en muchas cocinas es algo que está fuera de toda duda. Quien lo probó lo sabe. Los comensales del restaurante Porto dos Barcos, en el municipio de Santa María de Oia, tienen ahora la oportunidad de comprobarlo a lo grande.
El restaurante de Viladesuso anunció hace dos días el desembarco de un ejemplar de 42 kilos. «Es una buena pieza, ¡pero las hemos llegado a tener de 80 kilos!», recuerda Enrique Carneiro, padre de Juan Enrique, actual responsable del negocio. Precisamente es este último quien logró hacerse con semejante mero en la lonja del puerto de Vigo, que visita a diario para conseguir pescados y mariscos de alta calidad y justificar que Porto dos Barcos es un auténtico «templo del buen comer».
El equipo del restaurante de O Baixo Miño ya ha trabajado la pieza y hoy la sirven entre los clientes que quieran darse un capricho con una degustación de este pescado blanco de carne firme y delicada. «Fundamentalmente lo piden al horno, pero también lo servimos mucho a la plancha», cuenta Enrique Carneiro.
Aunque en este caso ha sido la despensa de O Berbés la que ha suministrado al restaurante de Oia el mero, Porto dos Barcos tiene asegurado su acceso a los frutos del mar al gestionar una pequeña flota que opera en el litoral Atlántico.