Patrocinado porPatrocinado por

Alehoop: sargazo y residuos de altramuces para que coman peces, pollos y lechones

Somos Mar REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS MAR

MONICA IRAGO

Un consorcio en el que participa la patronal Anfaco-Cytma consigue, mediante procesos de biorrefinería verde, aprovechar materias primas vegetales infrautilizadas para desarrollar nuevos ingredientes
ricos en proteínas

30 jul 2025 . Actualizado a las 04:47 h.

Anfaco Cytma, la patronal de la transformación, ha concluido, tras cerca de cinco años de trabajo y la inversión de 5,1 millones de euro, el proyecto Alehoop, que buscaba producir proteínas sostenibles a partir de biomasas residuales vegetales como las macroalgas y los subproductos obtenidos del procesado de legumbres, como el altramuz. Y lo ha conseguido: ha convertido el sargazo de arribazón en proteínas y fibras para integrar piensos acuícolas y transformar los residuos del procesado del altramuz y similares en ingredientes con hasta un 80 % de proteína para su uso en alimentos funcionales para humanos y piensos para peces, aves de corral y lechones.

Lo ha logrado tras validar en plantas piloto diversos procesos de biorrefinería verde para obtener ingredientes de alto valor nutricional tanto para alimentación humana como animal, con una notable reducción del impacto ambiental. Y mejoras en indicadores de salud animal, apunta Anfaco en un comunicado.

La iniciativa, desarrollada por un consorcio internacional en el marco del programa Horizonte 2020 de la Comisión Europea, permitirá sacar provecho de esas miles de toneladas que cada año arriban a las playas y ponen en peligro la supervivencia de los bivalvos. Ese sargazo que los mariscadores retiraron de los bancos de las Rías Baixas sirvieron de campo de pruebas a la patronal, que diseñó y validó un proceso novedoso para aprovechar esas algas y convertirlas en ingrediente de piensos acuícolas. El proceso incluye la limpieza con microburbujas, que elimina hasta el 50 % de arenas y conchas; una hidrólisis enzimática, que extrae un 60 % de proteína, y el filtrado y secado, para estabilizar el producto final.

Además, Anfaco cuantificó y caracterizó la biomasa, incluyendo análisis nutricionales, microbiológicos y toxicológicos, aparte de ensayar también pretratamientos de alta presión y ultrasonidos. «Los resultados de su inclusión en piensos acuícolas, validados por la Universidad de Cádiz, confirman la utilidad de estas proteínas en acuicultura y demuestran su seguridad alimentaria y baja huella ambiental», apunta la asociación.

Envases sostenibles y etiquetas limpias

Dentro del proyecto se ha elaborado una guía sobre el diseño responsable de productos alimentarios y su certificación, evaluando envases sostenibles, etiquetas limpias y estrategias de confianza para el consumidor.

Anfaco dice que el análisis de ciclo de vida (ACV) de los procesos desarrollados ha demostrado una reducción significativa de la huella de carbono, reforzando el papel de estas biorrefinerías como alternativa sostenible frente a las proteínas convencionales.