La pesca gala exige a Bruselas que endose el recorte de xarda a los que pescaron de más
SOMOS MAR
Las asociaciones consideran que no es justo que quienes han practicado una pesca responsable tengan que perder cuota y competir en el mercado con el producto de países incumplidores
05 nov 2025 . Actualizado a las 04:45 h.El posible recorte del total admisible de capturas (TAC) de xarda para el próximo año en un 70 %, tal y como han sugerido los científicos, ha levantado en armas a toda la cadena del mar de Francia, que está convencida de que no podrá asumir, y mucho menos resistir, una reducción que, calculan, dejará las 10.000 toneladas de ahora en unas 2.000, teniendo, además, que competir en el mercado con la que se importa de otros Estados costeros. Los mismos que, durante años, como queda constancia en el informe científico, han estado operando «al margen de las buenas prácticas de gestión». Se refieren a Noruega, Islandia, Groenlandia, Rusia, las islas Feroe... que «durante más de diez años han obstaculizado las negociaciones anuales entre los Estados costeros sobre un acuerdo de reparto equilibrado» y autoasignándose cuota, de forma que se ha estado pescando hasta un 40 % por encima de lo recomendado por los científicos.
Endosar la reducción a otros
Ante eso, el Comité Nacional de Pesca Marítima y Acuicultura, organizaciones de productores, comités regionales, mayoristas, minoristas, lonjas, puertos... —en definitiva, todos los eslabones del sector desde Dunkerque a San Juan de Luz— se han unido para exigir a la Comisión que rechace cualquier reducción en la asignación de cuotas europeas «hasta que se haya corregido el consumo excesivo, irresponsable y reiterado por parte de todos los terceros países». También reclama que se exijan responsabilidades a los Estados infractores «mediante la imposición de una compensación real por los excesos reconocidos y documentados desde el 2020», para lo que se aplicarían «deducciones anuales de sus cuotas futuras hasta que se recomponga el stock».
La pesca francesa subraya que «la caballa es un pilar fundamental» para el sector y su colapso amenaza cientos de empleos, a todos los buques y el modelo de sostenibilidad que caracteriza la pesca gala. «Todos nuestros barcos son ejemplares; respetan las normas y soportan las consecuencias de los excesos de otros. Sería injusto que los franceses siguieran pagando por los errores de una gestión deficiente», declaró Olivier Le Nézet, presidente del Comité Nacional de Pesca Marítima y Acuicultura.