Impactantes imágenes de 100.000 bacaladillas muertas en el golfo de Vizcaya
PESCA Y MARISQUEO

El arrastrero pelágico Margiris asegura que las perdió al romperle el copo, la oenegé Sea Shepherd cree que las tiró y Francia ha abierto una investigación
06 feb 2022 . Actualizado a las 10:12 h.Se suceden las reacciones ante las impactantes imágenes difundidas por la oenegé Sea Shepherd de miles de bacaladillas muertas flotando en el golfo de Vizcaya, frente a la costa francesa, a la altura de La Rochelle. Calculan que serían unos 100.000 ejemplares, por el espacio que ocupaba la mancha de un pescado blanco también conocido como lirio. La Asociación de Arrastreros Congeladores Pelágicos (PFA, por sus siglas en inglés) reconoce que proceden del buque Margiris, considerado el segundo pesquero más grande del mundo. Según esa organización, el arrastrero perdió esas capturas porque había tanta cantidad que le rompió el copo de la red. Desde Sea Shepherd Francia creen que los tiró deliberadamente al mar. Annick Girardin, ministra francesa del Mar, encargó al Centro Nacional de Seguimiento Pesquero una investigación «para identificar las causas de estos importantes descartes de pescado». «De probarse la infracción, se sancionará al armador responsable, que será identificado», añade la representante del Gobierno galo..
Tanta conmoción han causado las imágenes y el vídeo publicados por Sea Shepherd en sus redes sociales que PFA ha ofrecido su versión de lo ocurrido. Esa organización que representa a nueve empresas de arrastreros pelágicos de Francia, Alemania, Lituania, Países Bajos y Reino Unido dice «entender perfectamente la emoción que suscitan». Atribuye el vertido de lirios a un «incidente» que reconoce como «extremadamente raro: la red de arrastre que contenía la bacaladilla se rompió accidentalmente, liberando involuntariamente peces al mar». Explica algo que sucedió a las cinco de la madrugada de este jueves, 3 de febrero, «por la densidad sustancial e inusual en esta área» de esa especie, con lo cual habría atrapado muchos más peces de los que podía soportar la red.

Como en la Unión Europea (UE) están totalmente prohibidos los descartes, y el lirio se gestiona mediante cuotas, la asociación que representa al arrastrero pelágico que dice haberlos perdido asegura que el Margiris lo registró en su diario de pesca. Además de informar «a las autoridades competentes», lo comunicó a Lituania, país donde está registrado el buque, y dedujo esas capturas de las cuotas del pesquero.
El percance ocurre cuando en la UE se libra una dura campaña contra el arrastre de fondo, distinto al de superficie que emplea el pelágico Margiris. El lirio se consume fresco, aunque también se procesa para producir palitos de pescado o harinas, entre otros. Según los equipos de geolocalización, el Margiris continúa faenando en la zona que alfombró con una densa capa de ese pescado. Ese arrastrero congelador mide 143 metros de eslora y 18 de manga, reflejo de su gran capacidad de capturas. Operativo desde 1997, ha navegado con otros nombres y ha sido criticado por oenegés en distintas ocasiones.