El Reino Unido limitará más la pesca para compensar el impacto de la eólica
PESCA Y MARISQUEO

Barcos españoles, afectados por 13 grandes parques y más áreas protegidas
07 feb 2025 . Actualizado a las 04:45 h.A las decenas de buques de bandera o de capital español que faenan en aguas británicas les afectan decisiones del Reino Unido como el reciente desbloqueo de 13 «grandes proyectos eólicos marinos», cuya construcción se proponen «acelerar». Paralelamente, para «compensar los impactos en el lecho marino causados» al instalar aerogeneradores y líneas de evacuación de energía, el Gobierno que preside el laborista Keir Starmer anuncia más áreas marinas protegidas o la ampliación de las actuales. Como hasta ahora coinciden con zonas donde faenan sobre todo barcos comunitarios, entre estos preocupa la repercusión de las próximas limitaciones a la pesca.
Sobre todo cuando en junio del 2026 tocará revisar el Tratado de Comercio y Cooperación (TCA) entre la UE y el Reino Unido, el pacto del brexit, que en materia pesquera prevé negociar anualmente el acceso a los caladeros compartidos. Y en algunos es donde la flota española de Gran Sol, la mayoría gallega, captura especies clave como merluzas o rapes.
Desde Londres, los ministros Emma Hardy (Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales) y Michael Shanks (Seguridad Energética) anunciaron la «creación de miles de buenos empleos en el sector eólico marino», con inversiones de entre 24.000 y 36.000 millones de euros. Impulsan esa «energía limpia» ratificando su «compromiso de proteger el 30 % de nuestros mares» en el 2030. Como hasta ahora «no se han acordado compensaciones ambientales suficientes», se decantan por extender los espacios limitados a la pesca, previa «consulta a otras industrias y comunidades afectadas» y con los costes de creación y gestión «financiados por los desarrolladores de energía eólica marina».
La flota británica pide sus aguas
Desde la Federación Nacional de Organizaciones de Pescadores (NFFO, por sus siglas en inglés) del Reino Unido constatan que, con esa declaración, su Gobierno admite que los aerogeneradores en el mar «son aparentemente tan perjudiciales que es necesario crear una serie de nuevas áreas marinas para compensarlos». La patronal cuyo director ejecutivo es Mike Cohen asegura desconocer dónde se ubicarán, cuál será su tamaño y cómo se gestionarán, pero se felicita porque «ahora se admite que [los parques eólicos] tienen el potencial de dañar a las empresas pesqueras». Por tanto, si «es necesario desplazar a los pescadores, lo justo es que se les compense».
Aun así, si se les «va a dejar de lado para crear más áreas marinas protegidas, es posible hacerles sitio», añade la NFFO en su página web. Aprovecha para repetir la reclamación de cambiar «el desastroso acuerdo» del brexit, el que concedió a la UE el acceso a las aguas territoriales del Reino Unido. Al Ejecutivo de Londres le dice que puede «continuar con los actuales acuerdos de acceso insostenibles» o «recuperar todas nuestras aguas territoriales para los pescadores británicos», que así podrían «soportar mejor» el aumento de las áreas marinas protegidas.
La Comisión, «muy pendiente»
De las negociaciones del Tratado de Comercio y Cooperación UE- Reino Unido hablaron días atrás dirigentes de la patronal comunitaria Europêche con Costas Kadis, comisario de Pesca y Océanos, a quien le reclamaron «políticas claras» para garantizar la estabilidad y la seguridad jurídica del sector y «salvaguardar los intereses de la UE en aguas compartidas».
Igual que en esa reunión celebrada en Bruselas, tampoco había trascendido la decisión británica de crear más áreas protegidas cuando Charlina Vitcheva, segunda de Kadis, explicó en la Comisión de Pesca de la Eurocámara que, de haber problemas en el acceso a los caladeros, «podemos imponer aranceles a los productos» del Reino Unido. Reiterando el «compromiso» de alcanzar en la UE el 30 % en el 2030, aseguró que la Comisión Europea está «muy pendiente» para comprobar que las británicas «no afecten de forma desproporcionada» a la flota comunitaria.