Por una gestión de la anchoa más equitativa
PESCA Y MARISQUEO

La gestión de la anchoa (Engraulis encrasicolus) en el stock de la zona 8 del Consejo Internacional para la Exploración del Mar (CIEM) está establecida por un Total Admisible de Capturas (TAC) de la UE y se reparte entre España y Francia. El Reglamento 2025/202 establece, por recomendación científica del CIEM, 30.663 toneladas. Dicho TAC se reparte inicialmente según la famosa estabilidad relativa, en este caso, 90 y 10 % para España y Francia, respectivamente.
España dispone de una cuota inicial de 27.597 toneladas. Como viene siendo habitual, se ha alcanzado entre los dos sectores el Acuerdo de Guetaria para la anchoa del Golfo de Vizcaya, lo que supone de nuevo algunos intercambios y ajustes de cuota entre ambos países. A esto tenemos que añadir la flexibilidad interanual, es decir, hasta un 10 % de la cuota adaptada de la campaña del 2024 y no capturada en dicho año. Como consecuencia, la cuota inicial en la zona 8c para España es de 28.610 toneladas. La Secretaría General de Pesca, por resolución del 6 de marzo de 2025, establece medidas de ordenación, comenzando la campaña el 10 de marzo.
Como viene aconteciendo en los últimos años, en este he vuelto a leer y escuchar reiteradamente a los arrantzales y cántabros, fundamentalmente, que no se alcanza un precio razonable en lonja y que los ejemplares no son de buen tamaño en este arranque de la costera. Además, con el nuevo modelo que se va establecer el llamado «gestión OPPs» y, sobre el resto, Pesca ha manifestado «se pretende paliar las descargas masivas de anchoa de pequeño tamaño y de baja cotización detectada en los primeros días de campaña de años anteriores».
Creo que para evitar la saturación y de esta manera un descenso en el precio en primera venta, así como para realizar un reparto más equitativa a lo largo de la pesquería, se debería modificar la resolución de Pesca. Por ejemplo, distribuyendo la cuota de esta manera: el primer semestre, el 65 % y, dentro de este, 25 para marzo y abril y 35 % para julio y agosto. Y en el segundo semestre, el 35 %, un 20 para julio y agosto y el otro 15 para elresto del año.
Los topes máximos de capturas y desembarques de los buques de cerco del cantábrico y noroeste serían, en marzo y abril, de 6.000 kilos por barco y día para las de más 120 GTs y aquellos con 12 o más tripulantes enrolados, a bordo y dados de alta en el Instituto Social de la Marina (ISM), y de 4.000 para el resto. En mayo y junio pasarían, respectivamente, a 8.000 y 6.000 kilos por buque y día. Durante marzo y abril se deberá respetar la talla de 35 granos (piezas de anchoa por kilogramo), y en mayo y junio de 45 piezas, con un margen de tolerancia del 10 % en ambos casos. Y del 1 de julio al 30 de noviembre, los topes máximos serían de de 4.000 y 3.000 kilos. Las demás cuestiones de ordenación se aplicarían según la resolución de 6 de marzo del 2025 de la Secretaría General de Pesca.
Este stock es fundamental para todo el sector extractivo del Cantábrico y Noroeste, pero también para toda la cadena mar-industria de estas comunidades autónomas que bañan el Atlántico y cantábrico. Todos debemos cuidar y mimar este recurso, ahora que estamos a punto de cumplir 20 años del cierre de la pesquería de la anchoa, cuya reapertura requirió cinco años.