Formalizada la inyección de 76 millones en la pesquera viguesa
02 mar 2024 . Actualizado a las 12:07 h.En una época en que las aguas bajan revueltas para el sector de la gran pesca, Iberconsa navega firme. El grupo pesquero incrementó su facturación hasta los 475 millones de euros el año pasado, según avanzó ayer Alberto Freire, director general de la empresa e impulsor de este imperio que continúa como el tercero de España que más procesa y más genera. Con el espaldarazo del fondo estadounidense Platinum Equity, la compañía procesó más de 92.000 toneladas de pescado, según la misma fuente. El del año pasado no ha sido un crecimiento meteórico —más bien sostenido, ya que las ventas en el 2022 rondaron los 470 millones—, pero la lectura es positiva teniendo en cuenta el encarecimiento de la financiación y el descenso del consumo de pescado que ha advertido el sector, representado en Conxemar, a lo largo del 2023.
Se podría decir que Iberconsa acaba de arrancar una nueva etapa. En un momento delicado, el fondo Platinum Equity ha apostado por la pesquera gallega con una nueva inyección de 76 millones de euros, según confirman fuentes de la empresa. Esta maniobra oxigena los planes de la compañía a corto plazo porque le asegura liquidez, clave en un sector tan acostumbrado a disponer de crédito bancario como es el pesquero (también condenado a endeudarse). En paralelo, Alberto Freire ha legado a Alberto Encinas, nuevo consejero delegado, la máxima responsabilidad de un grupo que emplea a casi 4.000 empleados y participa en una flota de medio centenar de embarcaciones.
Además, la nueva inversión permite aplazar el vencimiento de una deuda de 385 millones, que se corresponde con el pasivo con el que el fondo norteamericano financió la compra de Iberconsa en el 2019 a Portobello. Esta operación pasó a la historia como la mayor protagonizada por un fondo en Galicia. Hace cinco años, Iberconsa definió este endeudamiento como una estrategia «para crecer y seguir ganando dimensión». En el 2022, de hecho, la pesquera protagonizó un crecimiento reseñable, al pasar de 400 a 470 millones de facturación.
Desde Vigo, Iberconsa ha logrado extender sus redes en mercados de medio planeta a través de quince marcas comerciales y con empresas en España, Argentina, Sudáfrica, Namibia, Portugal, Italia y China. Pese a su internacionalización, la de Vigo, conocida como Seafood Processing, continúa siendo la «planta modelo» para Alberto Freire, gracias a su nivel de automatización que tratarán de replicar en otras localizaciones. En la terminal de Bouzas trabajan unas 200 personas capaces de procesar más de 15.000 toneladas de pescado anualmente.
Iberconsa es un peso pesado en un sector liderado entre Nueva Pescanova y Profand, cuya facturación ronda los 1.000 millones y que tienen a su favor una marca valiosísima y un aliado estratégico como Mercadona, respectivamente. Por detrás, se encuentra Wofco, dirigida entre Borja Tenorio y Alberto Barreiro, con ansias de crecer, como revela su apuesta por hacerse con la planta de Fandicosta en Domaio (Moaña).
Todo ello ocurre en un sector revuelto, en el que han desembarcado empresas de rápido crecimiento que ya han levantado suspicacias por su delicada situación financiera actual.
Pionera en una red de arrastre biodegrable
El grupo Ibérica de Congelados (Iberconsa) se acaba de incorporar a la Alianza Galega polo Clima, promovida por la Xunta de Galicia. El director de la pesquera, Alberto Freire, y la conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, firmaron ayer el convenio de adhesión por el que la empresa se compromete a establecer sinergias en la lucha contra el calentamiento global. Entre demás hitos, Freire explicó ayer que Iberconsa testó el año pasado una red de arrastre biodegrable fabricada por Eurored.