¿Qué comen los hermanos Roca?

Pablo Portabales PERIODISTA

YES

12 nov 2016 . Actualizado a las 05:10 h.

Es un asunto delicado. ¿Adónde llevas a comer a tres hermanos que fueron elegidos mejor sumiller del mundo, mejor pastelero del mundo y mejor cocinero del mundo, respectivamente? Para empezar tiene que ser un sitio que no defraude ni por la comida ni por el vino ni por los postres. Y el trío, de apellido Roca para más información, está al frente del que fue elegido mejor restaurante del mundo y que opta a volver a serlo en cualquier momento. A lo mejor en estos casos es preferible apostar por un sitio que sirva un buen pulpo á feira, unos callos contundentes o un churrasco o unas sardinas. No sé. Pero ellos, que cuentan desde hace años con tres estrellas Michelin, decidieron ir al local de un colega de una sola estrella. Y ¿qué comen los hermanos Roca? «Comen producto. Por lo único que podemos convencer a los mejores del mundo es con producto, y aquí tenemos los mejores. Ellos ya estuvieron en los restaurantes más importantes del planeta y por técnica no vas a sorprender a gente que solo les falta tocar el cielo o que les monten un restaurante en la luna», reflexiona, siempre muy expresivo, el chef gallego Luis Veira, propietario del restaurante Árbore da Veira. Este establecimiento de A Coruña fue el elegido por Joan, Josep y Jordi Roca para un almuerzo privado. Fue el único momento de descanso y alejados de los focos que tuvieron en la apretada agenda que les organizó en Galicia el BBVA.

SIN COBRAR

Luis preparó un menú degustación en el que apostó por navajas, zamburiñas, bogavante, minchas o caramuxos, mero, gallo de corral, piel de anguila ahumada, pepino de mar, cigala, boletus, tuétano, caldos muy gallegos... Entre otros productos de nuestra tierra. «Creo que supimos engancharles bien y les gustó. No me puse nervioso, aunque eres consciente de que le estás dando de comer a los mejores, porque ellos transmiten mucha tranquilidad y te ayudan a que se te quite ese nervio», destaca Luis, que recuerda cuándo conoció a estos referentes de la cocina mundial. Fue hace unos quince años. Con su desparpajo habitual marcó el número de El Celler de Can Roca. «Cogió el teléfono Joan y le dije, soy un chaval de Galicia que estudié cocina y me gustaría aprender con vosotros. No quiero cobrar y tardo en llegar el tiempo que me lleve ir hasta ahí», le dijo. La llamada dio resultado y el joven cocinero estuvo un año formándose al lado del mediático trío.

HASTA LA COCINA

Lo recordaron cuando el lunes entraron en la cocina del restaurante coruñés. «Esta es como en la que tú trabajabas. Todos empezamos así», comentó Joan al ver el tamaño del espacio en el que trabaja su colega gallego. «Es que cuando yo estuve allí fue hace casi 15 años. Tenía dos estrellas Michelin y aunque ya era famoso, estábamos 27 cocineros, no 80 como ahora, y en una cocina en la que disponíamos de un metro cuadrado para cada uno, nada que ver con la que cuentan ahora», relata. Los hermanos Roca y Luis decidieron posar juntos en la cocina del restaurante que, aunque no es muy grande, sirvió para captar la imagen y para preparar un menú que sorprendió a esta gente, algo que parecía casi imposible. Me cuentan que Jordi, el de los postres, que es capaz de elaborar las creaciones más alucinantes, alabó el tiramisú que le sirvieron. Seguro que vuelven.