Un arquitecto gallego de 33 años fue seleccionado por una de las empresas que montó los Juegos Olímpicos de París y ejerció como director artístico de una edición que califica de «gran éxito»
17 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Se llama Sergio Bao García y está viviendo una experiencia única. Es uno de los grandes triunfadores de los Juegos Olímpicos de París, pero su nombre no figura en el medallero. A sus 33 años, este arquitecto coruñés que estudió en la Universidade de A Coruña es el director de arte de los Juegos, tanto de los que finalizaron hace unos días como de los Paralímpicos que comienzan en unos días. «Mi trabajó consistió en diseñar desde cero localizaciones de la ceremonia de apertura. Ocho barcos, dos puentes, un jardín, y tres palacios: Maison de la América Latina, Palais of Tokyo y, sobre todo, Trocadero», relata desde la capital francesa. El que está ya considerado como el evento más grande la humanidad por la complejidad de celebrar la inauguración durante seis kilómetros del Sena contó con el trabajo de un gallego. «Tuve que guardar todo en secreto, incluso con el miedo de que no pudiese realizarse. Empecé diseñando en 2D, 3D y, por último, gráficos para 19 lugares simultáneos. Es decir, arquitectura, creatividad, y grafismo. Todo, superregulado, ya que el Gobierno francés tenía que aprobar cada detalle. Fueron jornadas muy intensas en las que en unas horas tenía que hablar en francés, inglés, italiano, español e incluso chino», me cuenta a través de Telegram junto con el resultado de su trabajo en imágenes. Siempre le gustó viajar y desde los 15 años su vida no tiene fronteras, lo que le ayudó con los idiomas. Un buen día contactaron con él y empezó su aventura olímpica.
CUATRO ENTREVISTAS
El camino para ser art director no fue sencillo aunque reconoce que «los mejores trabajos se consiguen sin ser tú el que los buscas». Un especialista en reclutar talentos contactó con él desde Inglaterra. «Estaba en Barcelona dando clases y en la llamada me explicaron en qué consistiría mi trabajo. Les gustaba mi perfil de arquitecto y encargado de ceremonias y el hecho de que fuese cuidadoso con el tema de seguridad, evacuación en caso de incendios... Tras cuatro entrevistas me escogieron. Hay dos grandes empresas encargadas de los Juegos, que son, básicamente, el Gobierno francés y On Location, que es para la que yo trabajo y que se encarga de cada una de las Olimpiadas. Ahora acaban de firmar con FIFA», destaca. Sigue en París y asegura que «las Paralimpiadas listas y con ganas». Se acabó la primera parte, pero queda otra, también importante. Pero ya se puede hacer un balance, no del aspecto competitivo, sino de la organización en general. «Fue un éxito. Después de hablar con todos los equipos la respuesta es unánime. Se dudó mucho, se habló de que le quedaba grande a París, pero se ha conseguido con creces. Quedará para la historia la ceremonia inaugural por primera vez fuera de un estadio. Lo único que no me ha gustado es que la ciudad estuvo bloqueada todo este tiempo por temas de seguridad», analiza el arquitecto gallego director artístico de los Juegos.