El comisario Thierry Breton insta a valorar su aplazamiento «sin tabúes» por la «gigantesca perturbación» que provocará y la pérdida de 600.000 puestos de trabajo
La intención es desechar la comercialización de cualquier utilitario diésel, gasolina y también tanto híbridos enchufables como los que cuentan con autonomía propia
La organización de consumidores aconseja buscar modelos en oferta o apostar por vehículos eléctricos o híbridos, «que a medio plazo resultan más baratos»