Si hay que bailar, se baila. Si hay que dar charlas a ejecutivos, se dan. El polivalente Romay se ha convertido en un rostro conocido más allá de un deporte, el baloncesto, con el que fue medallista olímpico. Tras el confinamiento, anhela volver a Galicia para ver su hijo Nacho
Ellos hacen el agosto, y el septiembre, y cualquier mes. Porque estos locales no paran. Atraen a tanta gente que hay colas para entrar. Unos son conocidos por sus pinchos y otros por sus helados, pero todos lo petan. ¿Te vienes a conocerlos?